Quadri, un candidato de "públicos clave" para "viralizar su mensaje"
Nota del editor: Esta historia es parte del serial ‘En campaña con los candidatos'. Es la cuarta entrega de cuatro. Los textos de Josefina Vázquez Mota, Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador los puedes consultar aquí.
(CNNMéxico).- “¿Qué quién es Gabriel Quadri?”, pregunta a gritos María Villa a su familia para poder dar una entrevista sobre la visita del candidato presidencial a Boca de Tomates en Puerto Vallarta, Jalisco.
“Que nadie sabe, pero todos vimos cómo llegó en un coche con una camioneta con guaruras. La señora de allá —señala con el dedo—, le dijo algo al señor cuando se bajó de su coche, pero nadie de los de este lado lo conocemos”.
El candidato presidencial del partido Nueva Alianza no suele tener reuniones con miles de militantes. Según Luciano Quadri, su hijo y vicecoordinador de campaña, el equipo ha preferido eventos de entre 30 y 50 personas para dar a conocer sus propuestas de campaña, pero con "públicos clave" que pueden “viralizar” el mensaje, como jóvenes u organizaciones civiles.
Gabriel Quadri de la Torre fue el último aspirante presidencial en incorporarse a la contienda. Es un ingeniero civil, experto en consultoría de políticas públicas sustentables que cambió la camiseta de ambientalista por la de “candidato ciudadano” que busca dejar atrás la imagen del “político de siempre", pero siempre destacando los temas ambientales en su agenda.
Su principal propuesta, según ha dicho, es evitar a toda costa mostrarse como el político que no es, sino atraer a la “gente pensante” del país que ya está harta de los partidos y de promesas huecas y sin sentido.
Cerca de la gente
“¿No tiene seguridad social? Es una barbaridad que nadie la ayude. Vamos a ver su caso”, dice Quadri a una señora después de prometer que trabajará para que se respeten los derechos de las personas con discapacidad y hablar de inclusión educativa sin mencionar el papel de los maestros.
Como en la mayoría de sus reuniones, Nueva Alianza es responsable de elegir una sede en la que se puedan colocar globos blancos y otros azul turquesa, repartir banderas con el logo del partido –que al final del evento recoge—y hacer sonar una y otra vez los spots de radio de su candidato.
A tres cuadras de donde Quadri escucha testimonios de personas con discapacidad, en un local improvisado, Pilar y su mamá se disponen a vender, como cada domingo, cientos de platos de comida mexicana.
El sitio tiene tanto éxito que los pasajeros de una decena de autos esperan turno para comer, lo que causa confusión entre algunos que preguntan si la aglomeración es para ver al candidato neoaliancista.
“Ya vinieron a preguntarme, sobre todo periodistas, que si es aquí, pero nosotros no sabemos nada de que viene un candidato y ya nos fuimos a asomar y no se ve nada. El señor que me dijeron que viene ni lo conocemos”, dijo Pilar.
Además de enfrentarse a ciudadanos que no lo conocen, Gabriel Quadri tiene que lidiar con los cuestionamientos por su presunta cercanía con Elba Esther Gordillo, lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
“La señora no tiene nada que ver conmigo ni con mi candidatura, no milita en el partido”, insiste el aspirante presidencial cuando reporteros le preguntan si no está cansado de que lo involucren con la lideresa.
Ante universitarios, Quadri asgura, no sin antes disculparse por la “modestia”, que su objetivo es “elevar la calidad del debate”. El candidato ha visitado a lo largo de su campaña varias instituciones educativas, entre ellas la Universidad Iberoamericana, la Universidad del Valle de México, la Universidad Panamericana, el Tec de Monterrey y la Escuela de Periodismo Carlos Septién García.
Insiste en que no es un “político convencional” y sin explicar cómo, promete que cada uno de sus compromisos serán una realidad “gane quien gane” este proceso electoral, en el que después del debate presidencial del 6 de mayo, ha logrado superar el 2% de la intención de voto en el que se había mantenido las primeras semanas, según todas las encuestas.
Quadri es el aspirante que más interacción tiene en las redes sociales. Fue en ellas donde sus simpatizantes difundieron un video de la campaña "no oficial" en el que varias personas disfrazadas "con lentes y bigote" bailan a ritmo de tribal una melodía llamada el Quadribaile y que el mismo candidato bailó en un evento de Nueva Alianza al finalizar el debate.