La inseguridad, con alto costo en el sector empresarial
La violencia no sólo tiene un efecto negativo en el desarrollo social de los países en los que está más arraigada, pues si bien, los mexicanos son los que perciben este golpe de primera mano al ser víctimas de homicidios, secuestros y robos, la violencia y el miedo también pueden alterar los incentivos para las empresas.
De acuerdo con el Índice de Paz México 2016 , el miedo a la violencia puede causar efectos económicos y sociales adversos, como la obstaculización de transacciones empresariales, de nuevos negocios, la reducción del bienestar y la falta de confianza de la sociedad tanto en el gobierno como en sí misma.
A nivel estatal, el costo de la violencia para las empresas tiene una fuerte y directa correlación con el impacto económico de la violencia, que en gran parte tiene que ver con el PIB estatal, debido a que algunos delitos que afectan a las corporaciones en México, como la extorsión, suceden en estados con niveles altos de producción.
El Índice cita la Encuesta Nacional de Victimización de Empresas (ENVE), del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), que estimó que la carga total de la delicuencia para las empresas en 2013 fue de 159,000 millones de pesos o 1% del PIB y según el estudio, al menos dos tercios del costo de la violencia para las empresas se debe a pérdidas económicas causadas por la delincuencia.
El estudio realizado por el Instituto de Economía y la Paz revela que cerca del 60% de los empresarios encuestados consideró la inseguridad y la delincuencia como la principal preocupación para sus negocios.
Tan solo en 2015, el impacto económico del miedo a la violencia fue de 54,000 mil millones de pesos en el país, y el de la seguridad privada de 24,500 millones de pesos.
El total en el año 2015 fue de 2.12 billones de pesos a nivel nacional, equivalente al 13% del Producto Interno Bruto (PIB).
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Al respecto, el Índice de Paz señala que si que el costo de la violencia ascendió, con un aumento en los niveles de ésta, se tendrían implicaciones adversas muy graves para las empresas.
Sin embargo, explica que el costo de la delincuencia para las corporaciones no se tomó en cuenta como una categoría individual por la imposibilidad de estimar costos para los 13 años que duró el estudio y para evitar el doble conteo de las estadísticas de delincuencia utilizada, por lo que analizaron los datos de la ENVE 2014.
La Encuesta Nacional de Victimización de Empresas describe que la “cifra Negra” de los delitos ocurridos durante 2013 al sector privado asciende a 88.1%, es decir aquellos en los que no hubo denuncia o no se inició averiguación previa.
En ese sentido, el análisis incluye solo los costos directos de la delincuencia para las empresas y por ende no representa el impacto negativo total de la violencia sobre el sector económico formal, pues el número de empresas víctimas de delitos no refleja todas las unidas económicas que se vieron obligadas a dejar de operar debido al alto riesgo de la delincuencia y los costos relacionados.
