Puebla cierra gasolineras por presuntamente vender combustible robado

Las autoridades cerraron siete gasolineras ubicadas en la zona conocida como 'triángulo rojo' en Puebla por presuntamente vender combustible robado, informó el vocero del gobierno local, Javier Lozano Alarcón.

Las estaciones fueron clausuradas tras operativos realizados a partir del 18 de abril por parte de agentes de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), personal del Servicio de Administración Tributaria (SAT) y de la Unidad de Inteligencia Financiera de esta dependencia, así como de Petróleos Mexicanos (Pemex), además de militares y policías estatales.

“Efectivamente ya hubo suspensión de al menos 14 gasolineras, de las cuales siete están en Puebla. Pemex, junto con el SAT, siguen en este tipo de operativos (…) ¿qué es lo que detectan? Lo que es obvio, que estaban vendiendo gasolina sin comprarle a Pemex. Entonces, ¿de dónde demonios están sacando ese combustible? Y por eso también las cifras no les salen en cuanto a pago de impuestos”, dijo el funcionario.

Según Lozano Alarcón, algunas de las unidades clausuradas pertenecen al alcalde de Palmar de Bravo, Pablo Morales Ugalde, afiliado al Partido Social de Integración (PSI),

Sin embargo, en entrevista con medios este miércoles, Morales Ugalde confirmó que Pemex le rescindió el contrato de tres de sus gasolineras, pero negó que sea porque vendían hidrocarburo robado.

"Ya hicieron su investigación y no nos encontraron nada, no tenemos la verdad ningún problema", añadió.

El edil dice que solo enfrenta procesos administrativos y no de índole penal, y agregó que ni la PGR ni la fiscalía local lo han llamado a declarar, tampoco cree necesario separarse de su cargo como alcalde, pues señaló que sus problemas son empresariales y no como edil.

Sin embargo, Lozano Alarcón indicó que la Fiscalía General del Estado (FGE) como la Seido investigan a este edil por posibles nexos con bandas de huachicoleros.

También están indagando a otros que gobiernan en los municipios donde se concentra el mayor número de tomas clandestinas a los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex –Tepeaca, Quecholac, Acatzingo, Acajete, entre otros–.

“No puedo, no debo revelar cómo va el avance, del conocimiento que tengo sobre las investigaciones porque entonces sería como abrir el expediente públicamente de algo que se tiene que mantener en reserva pero sí, ciertamente están siendo investigados algunos alcaldes por su posible involucramiento con estas bandas. Algunas, como Palmar de Bravo, ahí hay una vinculación de la presidencia municipal con esas gasolineras que han sido aseguradas”, dijo Lozano en entrevista con medios.

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Adelantó que aparte de que se investiga a los dueños de dichas empresas por su colusión con bandas de ladrones de gasolina, también enfrentan delitos como presunto lavado de dinero y defraudación fiscal.

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En entrevistas pasadas, el gobernador Antonio Gali Fayad ha dejado en claro que su gobierno va tras la red de cómplices, tanto políticos como compradores de “huachicol”.

Sobre el tema, tanto el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, como el titular del Sistema de Administración Tributaria (SAT), Osvaldo Santín han declarado que sus operativos no solo se centrarán en gasolineras sino también en otras empresas como parte de la estrategia del gobierno federal en desactivar el tráfico de gasolina robada en Puebla y en el resto del país.

Puebla ocupa el primer lugar en registrar mayor número de ordeñas a ductos de Pemex a nivel nacional, y en los últimos tres meses, suma al menos 15 muertos ante la “guerra” que se mantiene contra los huachicoleros, de los cuales, 10 corresponden a dos enfrentamientos en Palmarito Tochapan el pasado 3 de mayo.

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