OPINIÓN: Pánico frente a la última embestida del dólar contra el peso

Nota del editor: Roberto A. Ruarte es asesor en mercados financieros. Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.

(Expansión) — Uno de los grandes operadores de mercado, George Soros, dijo una frase muy importante: “El mercado descarta lo obvio y apuesta por lo inesperado”.

Otro de los más afamados inversores, Warren Buffet, suele decir: “Cuando la mayoría se pone codicioso yo me pongo temeroso y me pongo codicioso cuando los demás son temerosos”

“El mercado suele mantenerse irracional más tiempo del que usted puede solventar”, es otra frase acuñada por un gran trader del mercado y “comprar el rumor, vender la noticia” es también otra frase muy reconocida en el ambiente financiero.

En nuestro caso, aplicando un modelo de análisis Elliott combinado con Fibonacci, decimos que el mercado es emocional, no racional, y que las emociones en los pisos son con pánico y en los techos con euforia.

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Todo esto puede aplicarse a la situación actual de la relación dólar-peso.

Cualquier persona que acceda a los números de comercio exterior mexicano se dará cuenta de la importancia de la exportación y de la importación de bienes y servicios en la economía mexicana al superar las 2/3 partes de su GDP y el principal destino de las exportaciones es EU y México le vende a EU más de lo que le compra en una relación cercana 2 a 1.

Lo obvio aquí, no solo para mexicanos sino para el mundo entero, es que luego de la animosidad manifiesta del presidente electo Donald Trump hacia México para renegociar los términos del NAFTA y la deportación de mexicanos, es que Trump ha agregado mucha incertidumbre y paranoia en los inversores que tienen posiciones en México.

La segunda frase también se aplica. Los tenedores de pesos están apanicándose y comprando dólares independientemente del precio que este valga, es decir, el miedo al efecto Trump. Para muestra, el anuncio de Ford de no invertir en la nueva planta en México, sumado al gasolinazo ha generado un malestar y negativismo que ha hecho a los inversores huir del peso hacia el dólar estadounidense en los últimos tres días.

Cualquier extranjero que llega a México, se dará cuenta que el país, salvo raras excepciones, con este dólar de 21.50, es uno de los más baratos de Latinoamérica, mucho más que Brasil y Perú y algo más barato que Chile y Colombia. De hecho, este valor de 21.50 parece irracional pero es lo que los inversores apanicados están pagando, y si usted hace un año y medio decía que 17 era una irracionalidad y que niveles por arriba de 20 eran imposibles, hoy con niveles de 21, el mercado se ha mantenido irracional un año y un mes y seguramente quitando la solvencia de muchos que apuestan racionalmente que sería imposible ver estos niveles.

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Los mercados son emocionales no racionales. La emoción ahora es el coraje en la sociedad mexicana por el 'gasolinazo', el miedo por lo que pueda hacer Trump a partir del 20 de enero y muchos están entrando en pánico y buscan en el billete estadounidense su refugio, una respuesta a su coraje, desconfianza, temor, incertidumbre que se convierte en pánico.

Es difícil en estos momentos tener la mente fría para observar la oportunidad. Todos corren por el súper dólar que ayer superó sus máximos históricos de 21.38 de noviembre, alcanzando el interbancario 21.62 para cotizar en 21.50 al confeccionar esta nota.

El mercado hizo un patrón muy confiable dentro de nuestro modelo de análisis: es un triángulo dentro de un triángulo. Esta figura es como una olla express a presión. El mercado en 20.77 y 21.38 empezó una larga consolidación con picos menores y pisos cada vez mayores, la superación de 20.77-20.88 técnicamente destapó la presión y ahora el mercado se liberó generando una subida de 70 figuras (centavos de pesos por dólar) en menos de dos días.

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El objetivo de la figura de triángulo se encuentra arriba de 22 pesos y el objetivo Fibonacci se ubica en 23.31 pesos, el nivel en donde la subida desde los 8.95 de 2001 es 0.618 veces Fibonacci, la subida desde 1993 desde los 3 pesos a los techos de 11.25 de 1999; adicionalmente el tiempo de subida del dólar es 2,618 veces desde 2001 a enero de 2017 el tamaño del tiempo de subida desde 1993 a 1999.

Seguimos pensando que a pesar de los miedos, incertidumbre, pánico que genera la actual coyuntura local de México, esta subida del dólar es terminal y guiará a un techo épico del dólar contra el peso. Idealmente, en la amplia zona de 22-23.32 pesos y el 2017 que amaneció muy problemático para la moneda mexicana terminará mucho mejor, con valores del dólar- peso bastante por debajo de los 20 pesos.

nullHace tres años venimos pregonando una subida del dólar contra el peso por encima de 20 pesos. La proyección ha quedado satisfecha y creemos que una vez alcanzada la zona de objetivo, un gran cambio de tendencia estará a la vuelta de la esquina; el miedo, el coraje, la incertidumbre, el pánico nublará a muchos la gran oportunidad que se presenta en el primer bimestre de este año para aprovechar los altos valores que está tomando el súper dólar estadounidense.

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Los años 2011-2013 eran oportunidad de acumulación (compra escalonada) de dólares contra pesos mexicanos. Creemos que esta subida apanicada de este comienzo de 2017 claramente es distribución (venta escalonada) en los altos valores que estamos y que puede llegar el dólar- peso con la asunción de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.

Todo lo que sube, tarde o temprano baja. ¿Estaremos cerca del clímax del dólar contra el peso? Nosotros pensamos que probablemente sí.

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