Jugar juegos de mesa podría impedir el desarrollo de alzhéimer

Jugar puede impulsar tu volumen cerebral, según una nueva investigación presentada esta semana en la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzhéimer en Copenhague, Dinamarca.

Las personas de mediana edad que fueron jugadores ávidos (piensa en crucigramas, ajedrez, cartas) tendían a tener mayores cerebros que las personas que no jugaron, según un estudio reciente en el que se analizaron escáneres cerebrales.

"Es como analizar la masa muscular de alguien”, dijo la médico Laurel Coleman del Centro de Evaluación Geriátrica del Centro Médico Maine en Estados Unidos. “Es malo cuando es más pequeña, es bueno cuando es mayor”.

Los investigadores analizaron específicamente ciertas partes de los cerebros de los participantes. El volumen entre los jugadores fue mayor en áreas que tendían a ser dañadas por la enfermedad de Alzheimer , lo que sugiere el potencial para retrasar; e incluso quizá evitar, la enfermedad. Las personas que mantenían activos su cerebros lograron más puntos en pruebas de su capacidad de pensamiento.

Más de 35 millones de personas en todo el mundo viven con demencia hoy, según un nuevo reporte. Para 2050, se espera que esa cifra sea más del triple con 115 millones. Los científicos intentan frenéticamente encontrar nuevas formas de detectar y prevenir la enfermedad de Alzheimer.

Coleman sugiere mezclarlo: probar actividades potencialmente estimulante como aprender un nuevo idioma o cambiar de leer relatos de no ficción a ficción; cualquier cosa que plantee un reto cognitivo.

Aquí están algunas otras cosas que aprendimos de la conferencia de alzhéimer de esta semana:

El ejercicio también puede ayudar a la mente

El ejercicio también parece retardar el camino hacia la demencia .

Dos conjuntos de datos del Estudio de Envejecimiento de la Clínica Mayo en Estados Unidos sugieren que el ejercicio puede influir positivamente en cómo se desarrollan el deterioro cognitivo leve (un precursor de la demencia) y la demencia.

En un grupo de pacientes con deterioro cognitivo leve, ejercitarse parecía protegerlos en contra del desarrollo de demencia. Los datos de un grupo diferente de pacientes saludables que se ejercitaban; ya sea ligera o vigorosamente, mostraron que eran menos propensos a ser diagnosticados con deterioro cognitivo.

“Nunca diríamos que estas cosas previenen totalmente el alzhéimer, que te curarán”, dijo Coleman, una geriatra. “Pero van a ayudar a tu cerebro”.

Una prueba de olfato podría detectar el alzhéimer

En el futuro, una prueba de tu sentido del olfato podría ayudar a los médicos a predecir tu riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.

En dos estudios separados, los científicos encontraron que las personas que no podían identificar ciertos olores eran más propensos a experimentar un deterioro cognitivo. Los investigadores creen que las células cerebrales que son cruciales para el sentido del olfato de una persona mueren en las primeras etapas de la demencia.

Los investigadores dicen que esta información podría ayudar a los médicos a crear una prueba de olfato para detectar tempranamente el alzhéimer. La detección temprana significa una intervención y tratamiento tempranos para retardar el progreso de la enfermedad. Los médicos hoy en día solo pueden diagnosticar la enfermedad de Alzheimer una vez que causó un daño cerebral significativo.

"A la vista de la creciente epidemia mundial de la enfermedad de Alzheimer, hay una necesidad para pruebas diagnósticas sencillas y menos invasivas que identificarán el riesgo de alzhéimer mucho antes en el proceso de la enfermedad”, dijo en un comunicado Heather Snyder, directora de operaciones médicas y científicas para la Asociación de Alzheimer en Estados Unidos.

Jacque Wilson y Stephanie Smith de CNN contribuyeron con esta historia.