Melania salió del cascarón en la primera gira de Trump al extranjero
Melania Trump definitivamente ha salido de su cáscara en su primer viaje al extranjero como primera dama de los Estados Unidos. Ha estado al lado de su esposo, el presidente Donald Trump, pero también ha hecho visitas por su cuenta en escuelas y hospitales. También estuvo en la audiencia con el papa, revelando su fe católica.
Este viernes en Sicilia, mientras que Trump se reunía con los líderes mundiales en la Cumbre del G7, la primera dama aprovechó la oportunidad para hacer turismo con los otros cónyuges, y lo hizo vistiendo una chaqueta Dolce & Gabbana de 51,500 dólares.
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La chaqueta 'Flores de 3D' es de la línea de ropa de diseño de la casa italiana, colección otoño de 2017, y todavía no está disponible en la mayoría de las tiendas. Sin embargo, la tienda de lujo, Moda Operandi, ya se ha agotado; los que hicieron la compra adelantada estaban obligados a hacer un depósito de 25,750.
Trump llevó este costoso abrigo en las actividades de este viernes que incluyeron una visita al Palacio Chierici City Hall de Catania. Para llegar allí, ella y los otros cónyuges fueron trasladados desde el lugar donde se realiza el G7, vía helicóptero privado.
La primera dama compartió su opinión sobre el viaje en las redes sociales.
Trump ha vestido en este viaje más Dolce & Gabbana que cualquier otra marca, incluyendo unos floridos zapatos en la cena del jueves en Bélgica, al final de la cumbre de la OTAN, que cuestan 1.995 dólares.
Pero sin duda la chaqueta ha sido la pieza más costosa de la gira de los Trump. En comparación, una familia estadounidense gana unos 55.000 dólares al año, según cifras de la Oficina del Censo de EE.UU. en 2015, es decir, apenas 4.000 dólares más que la prenda de la primera dama.
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Es posible que a Trump le hayan prestado la chaqueta, según es costumbre para eventos públicos o cenas importantes, pero la Casa Blanca no ha respondido una solicitud de CNN para obtener respuesta sobre este tema.
Si las prendas no las prestan, se espera que las primeras damas paguen por su ropa con su propio dinero.
