Ropa que viste y cuida el ambiente
Los diseñadores de prendas de vestir se suman a la ola de productos ‘amigables con el ambiente’ y ‘socialmente responsables’, mediante creaciones confeccionadas con algodón libre de pesticidas y cultivado en condiciones de trabajo humanas, que contrastan con sus precios.
Para diciembre, la tienda Barneys de Nueva York lanzará una promoción en la que ‘Rodolfo, el reno reciclado’ será su mascota. También incluirá colecciones de ropa con algodón 100% orgánico y accesorios de diseñador hechos con materiales certificados como sustentables. Esa tendencia ya permeó en tiendas como Saks Fifth Avenue, Bergdorf Goodman y H&M.
Entre las prendas de moda que entrarán en algunos de estos almacenes están, por ejemplo, un vestido de seda con detalle de mimbre de Cynthia Rowley (430 dólares); una bolsa Jimmy Choo con cuentas de madera aplicadas sobre ante (1,495 dólares), y un brazalete de conchas y diamantes del joyero John Ardí (10,000 dólares).
La tienda canadiense Holt Renfrew vende una línea danesa de ropa Noir para mujer, que dona un porcentaje de lo que obtiene para financiar medicinas y otorgar microcréditos a trabajadores africanos de la industria del algodón.
Para muchos la ‘ecomoda’ apenas comienza. “No es una moda pasajera, sino una tendencia mundial de largo plazo”, señala Barbara Atkin, directora de Moda de Holt Renfrew.
“Sin duda, hay una enorme oportunidad”, dice el presidente de Bloomingdale’s, Michael Gould. “La gente está desarrollando una afinidad por las compañías con acciones trascendentes para ser amigables con el ambiente. Pero no se puede renunciar a la calidad, la moda y la innovación”.
En febrero, Linda Loudermilk, conocida por sus diseños ecológicos, organizó un desfile en Nueva York que incluyó vestidos de noche hechos con satín de cáñamo y piel falsa. La diseñadora Stella McCartney, una impulsora de la ‘ecomoda’, lanzó la colección Care de bolsos y zapatos orgánicos y de cuidado para la piel.
En EU, el mercado de bienes y servicios que mejoran el ambiente y la justicia social se estima en 229,000 mdd, según Lifestyles of Health and Sustainability.
Otros estudios demuestran que 75% de la población de EU está dispuesta a dar una prima (alrededor de 10%), por productos socialmente responsables, asegura Ronnie Cummins, director de la Organic Consumers Association.
Pero, a diferencia de los alimentos que cuentan con órganos que certifican su procedencia, no hay instituciones similares para certificar la ‘ecomoda’, advierte Cummins.
