Sarkozy intercambia insultos
Sarkozy, quien está en caída libre en los sondeos de opinión, disparó su enésimo alboroto en sus nueve meses de presidencia el fin de semana cuando contestó bruscamente a un hombre en la multitud que se había rehusado a estrechar su mano.
"Me ensucias cuando me tocas", le dijo el hombre en un video que se difundió rápidamente en Internet.
"Entonces piérdete", replicó Sarkozy, usando un fuerte insulto que literalmente se refiere a los genitales femeninos -el tipo de lenguaje que podría dispensarse en peleas de bares de ciertos barrios.
Políticos de la oposición y los medios franceses unieron sus fuerzas el lunes para denunciar a Sarkozy, afirmando que como jefe de estado debería dar un mejor ejemplo a la nación. Pero los ministros dijeron que el insulto no debía ser inflado en forma desproporcionada.
Los aliados políticos del presidente Nicolás Sarkozy salieron presurosos a defenderlo el lunes después de que fue duramente criticado por insultar a un transeúnte que lo cuestionó en la feria de agricultura anual de la capital francesa.
"Habló de hombre a hombre, eso es todo. No deberían sorprenderse por esto", dijo a la radio Europa 1 el Ministro de Agricultura Michel Barnier. "El presidente es un hombre espontáneo, directo y muy moderno en su conducta", añadió.
La Ministra de Educación Valerie Pecresse dijo que fue un momento fugaz que no debería ser sacado del contexto.
"Fue un acto de irritación en una aglomeración de gente y que no debería impulsar ninguna controversia", comentó Pecresse a Canal Plus televisión.
Vulgar
Pero los comentaristas dijeron que el insulto no se adecuaba con los llamados de Sarkozy de mayor urbanidad en la sociedad francesa.
"El jefe de estado está presentando una imagen de sí mismo como irritable y vulgar, a años luz de la dignidad y respeto que él mismo pide", escribió el lunes en un editorial el diario regional Le Republicain Lorrain.
Sarkozy tiene mucho por lo cual estar irritable, después de una serie de sondeos desastrosos que han visto desplomarse su popularidad a un mínimo del 36 por ciento en febrero, 19 puntos abajo en sólo 3 meses.
Durante meses, el presidente ha sido protagonista de escándalos por su vida privada, política extranjera, temas religiosos, leyes más duras y medidas de orden, entre otros.
Lo preocupante para el mandatario es que no ha existido ninguna crisis política durante su período, sólo un rápido desencanto sobre su estilo de gobierno y una sensación de que no ha cumplido las promesas electorales.