Barcos brasileños buscan restos de avión
Una flota de tres barcos de la Marina de Brasil se dirige al lugar donde fueron encontrados restos que serían del avión de Air France desaparecido la madrugada del lunes en el Océano Atlántico cuando viajaba de Río de Janeiro a París. La Marina de Brasil informó este martes en un comunicado que la fragata "Constitución", la corbeta "Caboclo" y la patrulla "Grajaú" navegan rumbo a un punto informado por la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) donde se hallaron restos que podrían ser del avión siniestrado.
Agregó que, además, tres navíos mercantes -dos de bandera holandesa y uno de pabellón francés- fueron desviados de sus rutas para apoyar la búsqueda, dos de los cuales ya se encuentran en la zona, distante a 1,100 kilómetros al noreste de la ciudad brasileña de Natal.
La patrulla "Grajaú" debe llegar al lugar donde se observaron los restos a las 13:00 GMT del miércoles, en una travesía de 25 horas desde Natal, en tanto que los otros dos navíos arribarán en el transcurso del próximo jueves tras más de 40 horas de navegación.
Los restos del Airbus 330 de la aerolínea Air France, que desapareció la víspera en aguas del Océano Atlántico con 228 personas a bordo, estarían a unos 650 kilómetros al noreste del archipiélago brasileño de Fernando de Noronha.
Este conjunto de 21 islas, que tienen un total de 26 kilómetros cuadrados y que fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad, se encuentra en el Atlántico, a 545 kilómetros de Recife, capital del estado brasileño de Pernambuco.
Un avión C-130 de la FAB localizó esta madrugada restos que pertenecerían a la aeronave desaparecida de Air France, entre ellos una butaca, un objeto de color naranja, pequeños trozos de metal blanco y un tambor, además de restos de combustible y aceite.
Además, un piloto de la aerolínea brasileña TAM que se dirigía desde Europa a Sudamérica habría visto algunos puntos con fuego en el mar donde se habría registrado la última comunicación con el avión de Air France.
La búsqueda del vuelo 447 de la compañía francesa se realiza por mar y aire y está a cargo de una fuerza multinacional integrada, además de Brasil, por Francia y España.
El ministro francés de Transportes, Jean-Louis Borloo, indicó a la radio gala RTK que es crucial para los investigadores localizar las cajas negras o grabaciones del vuelo, que están programadas para emitir señales durante hasta 30 días.
Las labores de rastreo también cuentan con el apoyo del sistema de satélites del Pentágono de Estados Unidos por el amplio espacio que se debe rastrear en la ruta de 9,145 kilómetros entre Brasil y Francia.
Según un reporte de la Armada brasileña, la última posición conocida del vuelo de Air France corresponde a la latitud 00º26´59 sur y longitud 031º52´64 oeste, a unos 800 kilómetros de la ciudad brasileña de Natal, capital del estado de Río Grande do Norte.
Respecto a la ubicación de los restos, esparcidos en un radio de 60 kilómetros, el vicedirector de Comunicación Social de la Aeronáutica brasileña, coronel Jorge Amaral, dijo que el avión quizás trató de regresar al archipiélago de Fernando de Noronha.
Los fallecidos suman 32 nacionalidades, entre ellos 61 franceses, 58 brasileños, 26 alemanes, 10 italianos, dos españoles y un argentino, de acuerdo con un comunicado divulgado por Air France.
La cancillería italiana confirmó que 10 de sus ciudadanos iban en el avión de Air France, incluidos tres miembros de la Asociación de Trentinos en el Mundo, que viajaron a Brasil para llevar ayuda a varios residentes en ese país, afectados por las inundaciones de 2008.
Otros de los italianos que viajaban en la aeronave eran los empresarios Georg Lercher, de 34 años y Alexander Paulitsch, de 35, además Angela de Oliveira Silva, responsable de un centro de defensa de las mujeres con proyectos en Brasil, Italia, Nigeria y España.
