Desarrollando el futuro
Son muchos los proyectos que intentan atraer inversionistas a través del sector inmobiliario o de la construcción; no obstante, pocos resultan tan atractivos por sus planes de financiamiento, ubicación inmejorable y capacidad de mimetizarse con la naturaleza como lo hace Altozano, el nuevo Colima.
Su probado valor es quizá uno de los principales incentivos que seduce a quienes conocen este desarrollo habitacional de 156 hectáreas con campo de golf diseñado por Rafael Alarcón y Carter Morris, club deportivo y 870,000 m2 de áreas verdes.
Acompañado de la espectacular vista que direcciona al volcán de Colima, los terrenos de entre 305 m2 hasta 800 m2 que aquí se encuentran, se perfilan como la alternativa más redituable. Desde 2010 arrancó la construcción del complejo, demostrando rentabilidad con aproximadamente un 118% de aumento en la plusvalía ocho años después. Esa es la mejor carta de presentación, con dos sólidas etapas vendidas en su mayoría y dos más en proceso, Altozano reafirma madurez en términos de negocio.
La señal es clara, es tiempo de mover el dinero hacia buen puerto, y hacerlo puede ser más sencillo de lo que parece. Con atractivos planes de financiamiento, es posible adquirir una propiedad de lujo a tan solo un tercio de lo que costaría en ciudades como Guadalajara, con la ventaja de hacerse de un patrimonio sumando calidad de vida y bellezas naturales.
Los plazos de pago pueden ir de los 12, 24 hasta 36 meses, sin generar ningún tipo de interés, con apenas el 10% de enganche y descuentos de entre 5 a 15% dependiendo el tiempo a saldar. Si a esto se agrega la ganancia obtenida a lo largo de 8 años, entonces se crean las condiciones perfectas para comenzar a edificar un futuro, en donde la prosperidad se convierta en una constante en medio de un paraíso diseñado para encontrar el deleite en cualquier rincón.