Generación distribuida, sector con grandes expectativas de desarrollo

La generación distribuida ha crecido de manera exponencial en diferentes partes del mundo. Por ejemplo, California es el estado con mayor capacidad instalada de generación solar distribuida en Estados Unidos, siendo un ejemplo mundial en el aprovechamiento de esta tecnología con más de 4,000 MW instalados.

En contraste, como manifiesta Víctor Ramírez, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Energía Solar (ANES), en México existen alrededor de 94 mil contratos de interconexión en este esquema, los cuales aportan en total un poco más de 692 MW de capacidad instalada.

De acuerdo con lo reportado por la CRE, durante 2017 y 2018 se instalaron 210 MW y 233 MW respectivamente, mientras que el número de contratos registró un crecimiento del 100% anual con respecto a la capacidad instalada total. Hasta hace dos años se tuvieron 35 mil contratos, cifra que subió a 60 mil y de ahí se estimó llegar a los cien mil contratos.

“Del total de MW de energía solar y fotovoltaica que hay en el país, los cuales suman alrededor de 3 GW, aproximadamente una quinta parte corresponde a la generación distribuida”, señala el director ejecutivo de la ANES.

Actualmente, Nuevo León y Jalisco son los estados que sobresalen tanto en capacidad instalada como en el número de contratos con respecto a la generación distribuida, mientras que Tlaxcala, Chihuahua y Chiapas son los más rezagados en la materia.

El representante de la ANES revela que esto se debe, principalmente, a un asunto de concentración de población y de capacidad financiera. En el caso de Jalisco el esquema crece con más fuerza en la parte residencial, mientras que en Nuevo León, en tarifas industriales o en pequeñas y medianas empresas.

“De acuerdo con cálculos de la ANES, el tiempo de retorno de la inversión para las empresas que deciden invertir en generación distribuida es de cinco años. Esto significa que, en este periodo, las firmas pagan el total de la energía que van a consumir durante los próximos 25 o 30 años, lo cual representa un ahorro de 20 años de energía”, resalta el directivo.

En cuanto a la inversión que se requiere para instalar un proyecto de este tipo, Ramírez explica que los montos son variables, porque dependerán del tamaño de las instalaciones. Sin embargo, la generación distribuida es un modelo que ofrece beneficios tanto para usuarios residenciales como para comerciales e industriales.

Se vislumbra que el sector continúe al alza, pero habrá que vencer el reto de la calidad porque, si bien los costos de la tecnología están bajando, se debe asegurar que el que invierta en un techo solar tenga la calidad y cantidad de energía esperada.

Con 43 millones 420 mil usuarios de energía eléctrica, México cuenta con un gran potencial para el mercado de la generación distribuida. Esto se traduce en que hay viabilidad de que 40 millones de usuarios se interconecten bajo el modelo netbilling y 4 millones 320 mil lo hagan bajo el rubro net metering, menos los 100 mil que están ya conectados.

Dada la relevancia del esquema, durante MIREC WEEK se llevará a cabo la Cumbre de Generación Distribuida, donde se revisarán las regulaciones para proyectos menores a 500 kW, las oportunidades que ofrece el sector solar residencial en México y el panorama de los proyectos comerciales de energía a pequeña y mediana escala, así como los modelos de financiamiento y estrategias para proyectos comerciales e industriales.

El director de la ANES expone que este evento implica grandes oportunidades para concretar negocios y conocer más sobre los beneficios de las energías renovables. “Son foros esenciales para que exista una retroalimentación entre los actores de la industria”, concluye.