Madame Clicquot, una celebración de dos siglos
Era viuda a los 27 años de edad. La sociedad decimonónica dictaba que podría aspirar a poco para salir adelante. Pero Madame Clicquot no solamente lo hizo, sino que generó un producto que ha marcado la historia de las celebraciones de cualquier índole, durante los últimos 200 años.
El espíritu resuelto, inteligencia y energía de la emprendedora francesa catapultaron el negocio para generar el prestigio del que hoy goza.
La historia comienza con Philip Clicquot, quien era descendiente de banqueros y comerciantes propietarios de viñedos y, en 1772, en la región de Champaña, en Francia, fundó su casa de vinos. Su objetivo fue exportar las bebidas hacia Italia, lo cual en esa época resultaba muy innovador.
El hijo de Philip, François, estaba al frente del negocio, pero al fallecer en 1805, su joven esposa Barbe Nicole Ponsardin (Madame Clicquot) se quedó con esa responsabilidad, lo que también fue inédito en esa época, al tratarse de una de las primeras mujeres en liderar una empresa.
Desde entonces se apropió del sobrenombre La Grande Dame de la Champagne, porque ante la abrumadora demanda de vinos, buscó la manera de sacar adelante la producción y adquirió unas parcelas clasificadas ahora como Grand Cru.
Luego, Madame Clicquot ideó una mesa de removido: un espacio en el que se eliminan las lías —la materia que queda en la barrica después de la fermentación— con lo que logró un champagne de color puro. Junto con esta emblemática característica surgió, también, el lema que ha regido todo su linaje: “Sólo una calidad, la primerísima”.
Madame Clicquot falleció en 1866, pero el imperio que forjó siguió adelante con tal fuerza, que su tradición echó raíces en México: en 1888 se vendió la primera botella de Veuve Clicquot en el país.
Genealogía del lujo
A lo largo de los años, esta casa se ha mantenido sólida, incluso frente a los embates que significaron las dos guerras mundiales. En línea con la visión de atender los más refinados gustos, en 1987 surgió el Grupo LVMH (Louis Vuitton, Moët, Hennessy), que engloba marcas de lujo y del cual ahora forma parte Veuve Clicquot Ponsardin.
Como hemos visto, la innovación siempre ha sido una característica sus productos. La marca cuenta con los champagnes Brut Yellow Label, Extra Brut Extra Old, Semiseco, Rich, Vintage, así como La Grande Dame, creado en 1972 en honor a su fundadora, así como La Grande Dame Rosé, hecho por vez primera en 1996. Siempre vital, la casa Clicquot creó el primer champagne creado específicamente para la mixología: Veuve Clicquot Rich.
Se trata de un champagne fresco, diseñado para servirse frío y sobre hielo, listo para fusionarse con las propuestas de la coctelería contemporánea.
Veuve Clicquot continúa con el legado de una dama que en una etapa adversa logró encumbrar un negocio familiar; es por ello que interviene en distintos foros sobre la mujer y patrocinó el brunch Mujeres que transforman: Rediseñando el futuro, organizado por Grupo Expansión, que versó acerca de los retos y oportunidades que encara el género femenino en la sociedad contemporánea.