6 cosas que tienes que preguntar antes de inscribirte a una escuela de paga
Las universidades con fines de lucro tienen muchos críticos que las acusan de atraer a estudiantes de bajos ingresos con falsas promesas, para luego ofrecerles una educación de calidad pobre.
El gobierno estadounidense descubrió que eso era verdad en la hoy desaparecida red de escuelas Corinthian Colleges. Y la institución ITT Tech, que cerró este año, enfrentaba numerosas denuncias que la acusaban de mal informar a los futuros estudiantes sobre la proporción de graduados que encontraban empleo en sus áreas de estudio.
El gobierno del país cree que algunos estudiantes resultaron tan perjudicados que condonará su deuda estudiantil. Del mismo modo, DeVry University y Education Management Corporation, propietaria de los centros Art Institutes, Argosy University, Brown Mackie College y South University, han sido demandadas por engañar a los estudiantes.
Sin embargo, aunque han habido algunas escuelas cuestionables en la industria, no todas son malas. Las universidades con ánimo de lucro suelen ofrecer programas de formación técnica profesional en áreas como enfermería, justicia criminal, negocios y sistemas y tecnología de la información.
Atraen al estudiante no tradicional - uno que ya está trabajando y acaso tenga una familia. Muchos programas son de dos años o menos, lo que significa que tal vez obtengas un título y consigas un nuevo trabajo más rápido que en otra escuela. Ese tipo de esquema puede servirle a cierto perfil de personas.
Aunque la matrícula ha bajado en la industria en general, cerca de 2.9 millones de personas están actualmente inscritas en una escuela con fines de lucro en Estados Unidos.
Si estás pensando cursar un programa de dos años, estas son seis cosas que debes preguntar para evitar inscribirte en una escuela de dudosa calidad:
1. ¿Es una escuela con fines de lucro o sin fines de lucro?
Las instituciones con ánimo de lucro son propiedad de empresas que buscan ganar dinero. A veces las empresas cotizan, lo que significa que deben rendir cuentas a los accionistas.
La matrícula o inscripción es la principal fuente de ingresos de una universidad con fines de lucro. Así que inscribir a tantos estudiantes como sea posible es extremadamente importante.
No son tan selectivas como las escuelas sin fines de lucro. La National Association for College Admission Counseling advierte contra los reclutadores de las escuelas con fines de lucro que crean un falso sentido de urgencia para que te inscribas. La asociación recomienda que te tomes el tiempo para analizar tus opciones y leas la letra pequeña.
Las escuelas sin fines de lucro, en cambio, tienen otras fuentes de ingresos, como fondos que aporta el gobierno o donaciones, así que no dependen totalmente de los números de matrícula. Los colegios comunitarios son por lo general instituciones públicas, sin fines de lucro.
2. ¿Sus programas están acreditados, tienen validez regional, nacional?
Las universidades estadounidenses pueden presumir que tienen una acreditación nacional, pero algunos empleadores - especialmente algunos departamentos de policía en el país - exigen que tu grado sea de una escuela que esté acreditada también regionalmente.
La falta de acreditación regional también puede causar un problema si quieres obtener más adelante un título de licenciatura de una escuela sin fines de lucro con programas de cuatro años. Pues la mayoría de ellas cuenta con acreditación regional y sólo aceptará créditos de otra escuela acreditada regionalmente.
Si te interesa una carrera técnica en enfermería asegúrate de que la escuela también tenga una acreditación específica de enfermería de la Accreditation Commission for Education in Nursing (Comisión de Acreditación para la Educación en Enfermería, conocida por sus siglas ACEN).
3. ¿Está acreditada por ACICS?
Si la respuesta es sí, cuidado. Unas 245 universidades estadounidenses fueron aprobadas por la agencia nacional de acreditación llamada Accrediting Council for Independent Colleges and Schools, o ACICS.
Sin embargo, el gobierno dejó de reconocer la competencia de esa entidad en septiembre, y por tanto esas escuelas tienen 18 meses para encontrar un nuevo organismo que las acredite. Si no lo hacen, como estudiante no serás elegible para becas federales o préstamos escolares para estudiar en esas escuelas.
4. ¿Hay una escuela comunitaria más barata cerca?
Un “community college” o escuela pública podría tener un programa similar, y hay una buena probabilidad de que sea más barata. El año pasado, la matrícula y cuotas requeridas para programas de dos años en una institución con fines de lucro costaban 14,864 dólares al año, según datos del gobierno. Entretanto los programas de dos años en escuelas públicas costaron 3,941 dls para estudiantes residentes en el estado.
5. ¿Tienes que pedir un préstamo? Si es así, ¿federal o privado?
Si tienes que pedir dinero prestado para inscribirte, primero deberías pedir un préstamo federal (al gobierno). Ellos tienen menores tasas de interés y más opciones de pago que los préstamos privados. Pero el gobierno limita cuánto puedes pedir prestado cada año, varía dependiendo del número de años que llevas en la escuela y si eres es un estudiante dependiente o independiente.
Si un préstamo federal no cubre la totalidad del costo, algunas universidades con fines de lucro ofrecen sus propios préstamos privados para estudiantes. Quizás tengan tasas de interés más altas, así que asegúrate de preguntar si estás firmando un préstamo privado y, en caso afirmativo, cuáles son los términos.
6. ¿Cuántos estudiantes se gradúan?
El indicador White House College Scorecard puede decirte mucho acerca de una escuela y cómo se compara con el promedio nacional. Algunas estadísticas clave a considerar son: tasa de graduación, tasa de retención, el sueldo promedio de un egresado a 10 años de su inscripción, y la cantidad de deuda que deben los antiguos alumnos al graduarse.