Iniciativa promueve aumentar número de mujeres en consejos de administración
En México, sólo 6.1% de los integrantes de los consejos de administración son mujeres, por debajo del promedio de América Latina, de 7.3%, y muy lejos del promedio de los países de la OCDE, donde el número de consejeras es de 20%. La situación cambiará en los próximos años si sale adelante la propuesta que presenta mañana la senadora priísta Cristina Díaz y que pretende establecer un porcentaje de participación obligatoria para las empresas que coticen en Bolsa.
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La iniciativa propone que en los consejos de administración de las empresas, las mujeres representen, al menos, 20% de los miembros. De aprobarse, no será inmediata la implementación de la medida.
Díaz explica que se consideran una serie de etapas para su puesta en marcha: cinco años de gracia para dar tiempo de preparación a las empresas y para incorporar medidas de inclusión de género en el Código de Gobierno Corporativo, cinco más para alcanzar el porcentaje (desde 10% el primer año) y cinco para madurar el 20%.
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Concluidos estos 15 años, se eliminaría la ley de porcentaje mínimo. “En el sector público se han dado avances importantes, pero hay un tema que está pendiente, donde se debe legislar para dar mayor apertura a la participación de la mujer en el sector privado”, explica la senadora.
Para lograr esto, la iniciativa plantea reformar la Ley del Mercado de Valores. Díaz reconoce que el sector privado se ha mostrado preocupado, aunque señala que el periodo de gracia planteado debería despejar esos temores.
“Consideran que sería difícil encontrar mujeres que puedan ocupar las posiciones de consejeras, mucho menos independientes. Sin embargo, por eso estamos dando el periodo de gracia. Nadie se inventa de la noche a la mañana, pero hay mujeres que tienen ya la experiencia para estar ocupando posiciones en los consejos”. afirma.
Otro de los pilares de la iniciativa es la reforma de las leyes orgánicas de Nacional Financiera (Nafin) y Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext) para que incluyan la perspectiva de género en sus criterios de créditos. Además, el paquete contempla que las empresas grandes reporten de forma anual sus políticas y programas de inclusion con base en la Norma Mexicana de Igualdad Laboral, así como incentivar el cumplimiento de esta norma con mayor puntaje en las licitaciones públicas.
“En otros países lo están haciendo: las empresas están proponiendo estos informes anuales porque, además de que refleja el análisis de cómo están trabajando en el interior (de las compañías), les permite ser mucho más competitivo en estándares internacionales”, asegura la senadora.
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En cuanto al sector público, el objetivo es que las entidades paraestatales tengan un tercio del género menos representado en sus órganos de gobierno. “Tenemos una norma de igualdad laboral que establece como parámetro los informes y acciones anteriores, pero es una norma mexicana (que no es de obligado cumplimiento). Queremos exhortar a que la cumplan y, por qué no, hablar de una norma oficial”, agrega la legisladora.
Díaz reconoce que para incrementar la presencia de mujeres en puestos directivos debe haber una política gubernamental que impulse la flexibilidad, desde la licencia de maternidad y paternidad hasta contar con un mayor número de guarderías con horarios más adaptados a los laborales.
“América Latina es de las regiones con menor participación de mujeres. Colombia, con 16.2% de consejeras es un ejemplo. Y un informe de (la firma) McKinsey calcula que la equidad de género podría agregar hasta 12 billones de dólares al crecimiento mundial y, en América Latina, un crecimiento de 14%. Y nos lo estamos perdiendo”, dice.