La inteligencia artificial abre la puerta a la educación personalizada
MADRID, España (Expansión) - Bienvenidos a la nueva universidad, donde una nueva etapa se abre gracias a la tecnología. Ya no se trata de mezclar aprendizaje online con clases presenciales. El siguiente paso es la educación personalizada, a través de la inteligencia artificial. Una era donde el análisis de datos permitirá a cada estudiante tener mayor control de su aprendizaje.
Es la visión que se presentó durante EnlightED, conferencia mundial de expertos en educación, tecnología e innovación organizado por Fundación Telefónica e IE University, que se celebra en Madrid durante el South Summit, el mayor encuentro de emprendimiento de España.
Frente a las perspectivas que apuntan a que la universidad jugará un rol cada vez menos importante ante la posibilidad de acceder a programas educativos online, los especialistas señalaron lo contrario. Eso sí, es una universidad diferente a aquella en la que el profesor ocupaba el centro del esquema.
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“No se trata sólo de qué enseñamos, sino cómo enseñamos”, señaló Juan Romo, rector de la Universidad Carlos III. Y la inteligencia artificial está evolucionando el sistema hacia una educación personalizada: el análisis de datos permitirá conocer mejor las necesidades e intereses del alumno y enfocar los programas hacia ellos.
El profesor tendrá que evaluar el perfil de los estudiantes y programar la tecnología acorde a ello. “Y eso provocará que necesitemos profesores más cualificados”, agregó.
En esta nueva era donde es posible obtener conocimientos con tan solo un clic y en el que el conocimiento se ha vuelto prácticamente un commodity, a la universidad se va “para algo más”, apuntó Joseph Aoun, presidente de Northeastern University Boston. “Cuando ya no hace falta estar en un lugar para escuchar una ponencia, porque lo puedes hacer online, asistimos a eventos para conocer gente, generar contactos y experiencias. Igual en la universidad”, afirmó. “Para ello, el papel del profesor cambia, se convierte en un coach de aprendizaje para el alumno y cada día debe ser mejor”.
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Pelayo Covarrubias, presidente de Fundación País Digital y director de Universidad del Desarrollo, en Chile, señaló que el nuevo ciclo digital también provoca que se acorten los tiempos y el nuevo modo de las universidades será en “actualización permanente”, como si de un celular se tratara. “Esa es la ventaja competitiva, ser flexibles para acompañar las necesidades del mundo empresarial”.
Para Romo, esta flexibilidad es la que permitirá a los centros de estudios seguir vigentes. “Somos instituciones darwinianas, somos adaptativas y quien se adapta, sobrevive. Así harán frente al impacto de la Cuarta Revolución Industrial. Hay que recordar que la academia está generando las ideas y la tecnología. El algoritmo de Google o Facebook nacieron en universidades”, destacó el rector de la Carlos III.
Eso sí, la tecnología ha hecho que las habilidades que demanda el mercado laboral actual también cambien. Y no, no se trata de más conocimientos técnicos. La clave está en las soft skills o habilidades blandas (que José Escamilla, director de innovación del Tecnológico de Monterrey rebautizó como "power skills").
Esto ha provocado que las humanidades ganen protagonismo en todo tipo de programas educativos, ya sea que el estudiante curse una ingeniería o una licenciatura en Matemáticas. Esto ya ocurre en la Universidad Carlos III, donde todos los alumnos cursan una materia de humanidades, independientemente de la carrera que estudien.
"Tener esta formación ayudará a resolver los nuevos problemas que surgen con la tecnología, como los debates éticos derivados de la utilización de los datos", concluyó Romo.