Liderazgo tras la pandemia: flexibilidad, agilidad y apertura al cambio

Estos aprendizajes se dan frente a los cambios acelerados y dinámicos. “Hay que reconocer ese ritmo y considerar que no hay camino de reversa. Lo digital seguirá retando a los negocios tradicionales, habrá más plataformas digitales. Este entorno es la nueva realidad, a la que no solamente hay que adoptar sino prepararnos para que vengan cambios más acelerados y rápidos”, apuntó Lina Angelov, directora Líder de Innovación de KPMG en México y Centroamérica.

De ahí que sea un tiempo de aprender rápido y convertirlo en lecciones, señaló Daniel Marcos, CEO y cofundador de Growth Institute. Las organizaciones deben ser flexibles y debemos comprender que la organización se transforma junto con el cambio, aportó, a su vez, Ricardo Triana, director del Project Manager Institute (PMI) en Latam.

“Todo esto deberá acompañarse con una comunicación constante. La gente (los equipos de trabajo) recordarán cómo los trataste en las crisis y en los días malos. Los líderes serán recordados porque hicieron lo correcto por sus equipos”, añadió Daniel Marcos.

Agilidad, flexibilidad, under skills…

Entre los conceptos y acciones que fueron delineando los expertos a lo largo de esta mesa de participación se encuentran:

1. Moverse hacia la innovación. Para los líderes en este entorno la innovación no es opcional. Deben llevar la iniciativa, la proactividad antes de que los cambios los alcancen. De ahí que sea tan importante que un líder tenga un mindset muy abierto, para aceptar que no somos expertos en todo. Así podrá fomentar el aprendizaje continuo. Contar con equipos multidisciplinarios contribuirá mucho a moverse hacia la innovación. (Lina Angelov)

2. Holocracia. Este es un tiempo de seguir sistemas horizontales para la operación de la empresa. En este contexto, el liderazgo se muestra en toda su esencia: es transparente quién coordina un equipo, quién es cercano. Los líderes sensibles y humanos logran un alto sentido de corresponsabilidad. (José Ramón Barreiro)

3. Crear conexión. Es importante reconocer que todos estamos ajustándonos a los nuevos desafíos, que las organizaciones han estado aprendiendo al ritmo que se presentaron los acontecimientos. Así que resulta importante crear esa conexión entre los equipos de trabajo para saber que estamos viviendo esto juntos. (Ricardo Triana)

4. Aprendizaje autodidacta. Los líderes comprenden que hay que aprender nuevos conceptos, ajustarse a nuevos lineamientos y hacer lo posible para adquirir nuevos conocimientos. (Daniel Marcos)

5. Trabajar en las under skills. Frecuentemente se habla de la importancia de las soft skills para ejercer el liderazgo —como las habilidades de comunicación y de empatía— pero en un escenario disruptivo las habilidades derivadas de experiencias “negativas”, como los lanzamientos fallidos y los fracasos son necesarias para, por una parte, impulsarse hacia lo nuevo y por otro lado desarrollar habilidades como la tolerancia a la frustración y aprender de los errores. Se convierten en competencias para enfrentar los problemas. (José Ramón Barreiro)

6. Power skills. También es un tiempo para fomentar todas aquellas habilidades técnicas y de conocimientos que contribuyan a crear soluciones, a generar resiliencia, a acercarnos con los clientes, es decir, todo aquello que impulse a la empresa a elevar sus resultados hacia un nivel superior. (Ricardo Triana)

Herramientas para salir adelante

Durante esta sesión de Diálogos Expansión se habló de que las organizaciones deben ser ágiles, como un requisito indispensable para adaptarse a esta nueva era. Los habilitadores adicionales son aquellos que fomentan la innovación interna —como los crowdsourcing de ideas para mejorar la empresa y abrir nuevos caminos de negocio— pero que también aquellos que interconectan al negocio con redes externas con quienes puedan innovar de manera complementaria, como son las startups o las aceleradoras de negocios.

De la misma manera, todas las buenas prácticas que se puedan tomar como referencia global ayudarán a mejorar los resultados. En esta tarea, las soluciones que ayuden a la gestión y la innovación ayudarán a concretarlas mediante el acuerdo de objetivos, responsabilidades y KPIs.

“El nuevo líder es un miembro más del equipo y se compromete a dar soluciones a corto plazo, generar condiciones en mediano plazo y soñar diferente en el largo plazo”, señaló José Ramón Barreiro Iglesias, director de la Facultad de Negocios de la Universidad La Salle.

El liderazgo en estos nuevos tiempos implica abrazar el cambio.