La Liga española tiene un momento decisivo con el Real Madrid-Barcelona
La enorme distancia que han marcado Barcelona y Real Madrid en las últimas temporadas respecto al resto de rivales en la Liga han convertido sus enfrentamientos directos en momentos decisivos para la suerte del campeonato .
El encuentro de este sábado en el Santiago Bernabéu (a las 15:00 horas de México) podría significar el tercer campeonato consecutivo para el equipo de Guardiola.
Los azulgrana llegan a la cita con ocho puntos de ventaja cuando sólo restan siete jornadas.
"Mañana nos jugamos la Liga. Si ganamos, daremos un gran paso para ser campeones. Si no, todavía quedará mucho", afirmó el técnico del Barcelona en la rueda de prensa previa al partido.
A pesar de tener margen para el error, Guardiola no reservará a nadie. "Siempre intento poner el mejor equipo y el Bernabéu es el Bernabéu, y el Madrid es el equipo con más ligas y copas de Europa. En su estadio es el favorito".
Donde sí tendrá que improvisar es en el entramado defensivo. El capitán, Carles Puyol, ausente de los terrenos de juego desde enero, ha entrado en la convocatoria, pero es improbable que reaparezca. Eric Abidal continúa recuperándose de la operación a la que fue sometido para extirparle un tumor en el hígado y Javier Mascherano está sancionado.
La opción de que Keita actúe en el medio centro y Busquets retrase su posición a la línea defensiva es la más plausible, aunque Guardiola ya sorprendió el año pasado colocando a Daniel Alves como extremo derecho.
Si el Barcelona logra la victoria sería la tercera consecutiva en el feudo madridista , la sexta en un clásico, igualando el récord que logró el Real Madrid entre 1962 y 1965. Para evitarlo, el equipo de Mourinho tan sólo contará con las bajas de tres jugadores con roles secundarios: Fernando Gago y Lass Diarra, que están lesionados, y Esteban Granero, sancionado.
Con todo en juego, antes de aferrarse al último vagón de la liga, el técnico portugués ha vuelto a ser protagonista en la rueda de prensa. Esta vez por su mutismo. Mourinho ha comparecido junto con el segundo entrenador, Aitor Karanka, pero no ha respondido a ninguna pregunta. "Siempre que habla el mister se sobredimensiona todo. No hemos sido nosotros los que últimamente nos hemos salido de tono y no va a ser él el que vaya a calentar el partido", justificó el preparador vasco. La novedosa escena acabó con gran parte de los periodistas abandonando la sala.
Después de perder 5 a 0 en el partido de la primera vuelta en el Camp Nou Mourinho dijo "que era un derrota fácil de digerir" . Los hechos le contradijeron y su equipo empezó a perder pié en la lucha por el campeonato. Una derrota en el clásico siempre deja heridas que tardan en cicatrizar.
Este sábado la liga tendrá su definición o el Madrid continuará vivo. El que salga airoso, además, tendrá un plus moral para afrontar los otros tres encuentros restantes, la Copa del Rey y la Liga de Campeones.