Pacquiao conserva su campeonato mundial welter al derrotar a Shane Mosley
El filipino Manny Pacquiao no necesitó de mucho esfuerzo para dejar en claro que es el mejor boxeador libra por libra del mundo después de vencer por decisión unánime a Shane Mosley, para así retener su cetro mundial welter de la Organización Mundial de Boxeo.
“Pacman” fue otra vez una máquina de impactos y dobló en el intercambio de golpes a su veterano oponente de 39 años, que en los últimos minutos deseaba que acabara el combate y olvidó ir al ataque. Mosley dio sólo unos cuantos destellos, pero ninguno pudo eclipsar la grandeza del filipino que es una leyenda viva después de que ha ganado campeonatos en ocho diferentes divisiones en su carrera.
A Pacquiao (53-3-2) le bastaron un par de asaltos para darle un rumbo claro a la defensa del cinturón que se ciñó en noviembre de 2009, cuando venció al puertorriqueño Miguel Cotto, y a pesar de que en el décimo round fue a la lona y se marcó como una caída oficial, su superioridad jamás estuvo en cuestionamiento.
Las tarjetas de los oficiales no dejaron rastro de cuestionamiento (118-109, 119-107 y 119-108) para engrosar el listado de víctimas de los puños del filipino, quien en el tercer round derribó a Mosley (46-7-1) con una potente combinación que obligó al réferi Kenny Bayless a usar la cuenta de protección.
La primera parte de la batalla fue una ponencia magistral de Pacquiao del boxeo más completo, fino y potente, cuando los pocos intentos de “Sugar” por hacerle daño los contuvo cerrando la guardia y de inmediato cambiaba de defensa a ataque. Shane pronto entendió que el jab que usaba para evitar que el multicampeón se acercara a hacerle daño, no le serviría por mucho para que absorver el castigo.
Mosley dejó de caminar hacia atrás el sexto asalto y entró en el intercambio con “Pacman”, dando sus mejores golpes de la noche. Minutos de esperanza que luego el filipino dejaría en el olvido retomando el control de la pelea que dominó desde los primeros asaltos.
Fue en el décimo asalto que resurgieron los gritos cuando Mosley, con un golpe en el hombro, hizo que Pacquiao cayera. Bayless comenzó la cuenta ante la incredulidad de “Pacman”, quien reía mostrando el protector bucal mostrando que esa caída era más un accidente que producto de algún impacto.
No hubo daño y ese momento provocó que naciera otra vez el fuego de Pacquiao para lanzarse al frente. Sus puños una y otra vez fueron contra la humanidad de Mosley, quien ya no buscaba nada en el encordado y daba zancadas en retirada.
Con la victoria en la bolsa, el filipino volvió a mostrar compasión por un oponente de menor calidad y dejó de atacar. El triunfo sería cosa de minutos y así completó la velada, como lo hizo ante el mexicano Antonio Margarito, sin querer hacer más daño del necesario a su rival para demostrar que es el mejor boxeador del planeta.