La F1 en Bahrein sigue firme pese a 'tacticas de miedo': organizadores
Los organizadores del Gran Premio de Bahrein insistieron el martes que la carrera de la Fórmula Uno programada para realizarse en el reino del golfo este mes debe de continuar a pesar de la creciente presión para que sea cancelada.
El circuito de la F1 regresará a Bahrein después de que el evento del año pasado fuera cancelado con poco tiempo debido a la situación de seguridad en el país a raíz de la primavera árabe .
Los activistas han criticado la decisión de reinstaurar a Bahrein como la tercera ronda del campeonato mundial de este año , señalando presuntas violaciones de derechos humanos y la persistencia de disturbios.
Se confirmó el martes que varios policías de Bahrein fueron heridos por una bomba casera durante una protesta cerca de la capital Manamá.
La manifestación fue para pedir la liberación del activista de derechos humanos, Abdulhadi al-Khawaja, quien actualmente está en una huelga de hambre para protestar contra la sentencia de cadena perpetua que recibió por su presunto papel en los disturbios.
Pero Zayed al-Zayani, director del Circuito Internacional de Bahrein donde se llevará a cabo la carrera de la F1, dijo el martes que las críticas a las autoridades estaban fuera de lugar, culpando a “tácticas alarmistas” por acrecentar dudas sobre si la carrera debía continuar.
“Lo que ha estado pasando es que los que han estado observando desde afuera; que no han estado lo suficientemente interesados o comprometidos a investigar la situación por su cuenta, han estado manejando este debate, a expensas de esos partidos neutrales que han tomado el problema para investigar la situación de primera mano”, dijo Zayani en un comunicado difundido a CNN.
“Esto, combinado con las tácticas alarmistas de ciertos grupos extremistas en sitios de redes sociales, han creado conceptos erróneos sobre la situación actual”.
Zayani siguió: “Por lo tanto insto a todos los interesados en el deporte que escuchen a ellos con un punto de vista informado, educado sobre la situación y que formen sus propias opiniones”.
El gobierno de Bahrein dijo el martes que los visitantes del Gran Premio encontrarán condiciones “seguras y estables”.
“Como el gobierno lo ha dicho muchas veces, las protestas continúan en pueblos distantes y un pequeño número de esas protestas se vuelven violentas. Como se observó, el uso ocasional de cocteles Molotov por un pequeño número de manifestantes contra la policía resultó en heridas serias”, se lee en un comunicado enviado a CNN.
El presidente de la Fórmula Uno, Bernie Ecclestone, dijo el martes que dejaría la decisión a los equipos individuales sobre su participación en Bahrein.
“No podemos forzar a las personas a asistir”, dijo a la Asociación de Prensa del Reino Unido.
“No podemos decir ‘tienes que ir’; aunque violarían su acuerdo con nosotros si no van, pero no ayuda”.
Ecclestone dijo que él y Jean Todt, el presidente del organismo del automovilismo mundial, la FIA, consultarían a los equipos en Shanghai, China este fin de semana donde se llevará a cabo la segunda ronda del campeonato de F1.
“Siempre nos reunimos con los equipos”, añadió.
Mientras tanto, los activistas están tratando de presionar por una cancelación de último minuto, incluido el grupo sin fines de lucro, Avaaz.
“El año pasado fue una victoria fácil, había más énfasis en la matanza de manifestantes sin armas por lo que hay una inclinación menos a que se cancele la carrera de parte de la FIA (este año). Pero, sin embargo, el régimen está cometiendo violaciones de derechos humanos contra civiles inocentes”, dijo el vocero de Avaaz, Will Davies a CNN.
Bahrein organizó la primera carrera de la F1 en el Medio Oriente en 2004 y los organizadores dicen que el evento trae grandes beneficios económicos al reino, que valía un estimado de 295 millones de dólares en 2010.