Un deportista de Sudáfrica vivió un caso similar al de Oscar Pistorius
Amanece. Una estrella internacional sudafricana salta de la cama después de escuchar a un “intruso”. Saca una pistola y dispara y asesina a una mujer joven inocente.
Este no es el caso del deportista olímpico Oscar Pistorius.
En un incidente extrañamente similar en mayo de 2004, cuando el exjugador de rugby de Springbok, Rudi Visagie, fue despertado por su esposa, quien escuchó a un automóvil en su entrada en Nelspruit, Sudáfrica.
La pareja pensó que un ladrón se llevaba el automóvil de su hija.
En medio de temores aumentados tras los asesinatos de sus vecinos la semana anterior, rompió la ventana de la recámara y disparó al automóvil. La bala golpeó al conductor en el cuello.
Cuando el automóvil se detuvo, corrió hacia él, pero la habitación de su hija estaba vacía.
“Escuché a Rudi gruñir”, dijo su esposa, Frieda Visagie. “Me pregunté qué ocurría… y me dijo que Marle estaba en el automóvil”.
Su hija, Marle Visagie, de 19 años, estaba en el asiento del conductor.
Y en ese instante, sus vidas cambiaron para siempre.
“Ocurrió que un tiro de un millón… pasó a través de la puerta y penetró a mi hija a través del cuello”, dijo Visagie. “Estaba muerta en el sitio”.
Marle Visagie dejaba la casa a aproximadamente las 05:00 horas para llevar un regalo de cumpleaños a su novio. Ella le había notificado a sus padres el plan dos semanas antes.
Además de llorar la muerte de su hija, la familia estaba preocupada de que la estrella del rugby fuera encarcelada.
“Es mi hija, es mi esposo, qué va a pasar ahora”, dijo su esposa.
Una corte dictaminó que el exjugador de rugby había sufrido lo suficiente la muerte de su hija y optó por no juzgarlo.
Visagie era un nombre conocido y había representado a Sudáfrica en varios partidos internacionales de rugby.
‘No puedes regresar esa bala’
Su caso es parecido al de Pistorius, quien le disparó fatalmente a su novia, Reeva Steenkamp, el día de San Valentín, al decir que la confundió con un intruso.
Pistorius, un atleta doblemente amputado que hizo historia como el primer atleta paralímpico en competir en los Olímpicos, está libre bajo fianza mientras espera el juicio de un cargo de asesinato premeditado.
La estrella del atletismo dijo que pensó que un intruso se escondía en el cuarto del baño en su casa de Pretoria. Dijo que disparó en un ataque de terror antes de percatarse que su novia estaba dentro.
“Le puedo decir, me siento contigo”, dijo Visagie. “Estás en la situación. No puedes retractarte… no puedes regresar esa bala”.
Pistorius dejó la cárcel la semana pasada después de pagar una fianza en efectivo de aproximadamente 11,200 dólares, con unos 100,800 dólares adicionales para el 1 de marzo.
Aunque está libre y espera el juicio, el hombre apodado Blade Runner tiene que cumplir con varias condiciones de libertad bajo fianza, incluidas no tomar alcohol, dejar su pasaporte y no puede estar cerca de un aeropuerto, así lo dictaminó un juez.
Tampoco tiene permitido regresar a la casa donde ocurrió el tiroteo.
Pistorius corre con prótesis de fibra de carbono, de ahí su apodo. Nació sin huesos en la parte baja de sus piernas y los médicos le amputaron sus piernas por debajo de las rodillas cuando tenía 11 meses de edad.
Ganó fama como un símbolo de triunfo sobre la adversidad cuando compitió en los Olímpicos de Londres el año pasado. Aunque no ganó una medalla ahí, rompió un récord para ganar la carrera de 400 metros varonil en los Juegos Paralímpicos unas semanas después.
Lo más difícil
El exjugador de rugby dijo que simpatiza con el velocista.
Las personas en esas situaciones pasan por muchas emociones, incluidas miedo, enojo e impotencia, dijo Frieda Visagie.
“No quería hablar en frente de las personas; eso fue lo más difícil de hacer para mí”, dijo su esposo.
A pesar de su angustia, su fe cristiana le ayudó en los momentos difíciles. Ahora viaja por todo el país y aconseja a víctimas de traumas.
“Solo quiero animarlo (a Pistorius) y decirle, escucha, hay muchas personas que oran por ti”, dijo.
Y si necesita hablar, Visagie dijo que está listo para ayudar.
Faith Karimi de CNN contribuyó con este reporte desde Atlanta, Estados Unidos