'Tiburón' a la vista en el futbol de Primera División en México
El anuncio del regreso del futbol de Primera División a Veracruz, estado ubicado al sur de México, revivió los recuerdos de la Tiburomanía: tardes con estadio lleno, miles de aficionados en los entrenamientos por las mañanas y largas filas para comprar un boleto para ver a los Tiburones Rojos.
"Eran tiempos en los que era casi imposible conseguir un boleto para entrar a ver un partido", dijo en 2012 Eduardo Moses, exjugador de los Tiburones Rojos en 1989, año en que surgió una fiesta deportiva cuando el equipo ascendió a primera división luego de que Veracruz no tuvo futbol profesional durante 10 años.
Ahora, los Reboceros de La Piedad —campeones de la Liga de Ascenso del futbol mexicano— jugarán en Veracruz con el nombre de los Tiburones Rojos. El nuevo equipo fue presentado este jueves por el gobernador de la entidad, Javier Duarte, y el propietario de la franquicia, Fidel Kuri Grajales.
Fidel Kuri explicó a CNNMéxico que La Piedad, en Michoacán, sede anterior del equipo, no es viable para sostener a un grupo de futbol de Primera División.
"Mantener un equipo de primera división cuesta mucho trabajo, la misma afición de La Piedad no cumplía, iban a ver el equipo 2,500 o 3,000 personas cada quincena, y ahorita los recursos que se requieren son mayores para tener un equipo competitivo", dijo Kuri Grajales.
"Le tengo mucha fe a Veracruz y mucha confianza en la afición. Ojalá que así como pedían el equipo de Primera División, así le cumplan al equipo. Estamos cumpliendo y ahora la afición es la que tiene que cumplir con nosotros", agregó.
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Una afición fiel
José Valdés contó a CNNMéxico que desde la Tiburomanía no ha dejado de seguir a su equipo; ha viajado 60 kilómetros cada 15 días para ver los partidos de la Liga de Ascenso.
"La gente aquí en Veracruz es muy fiel (…) Nosotros que hemos tenido un equipo siempre armado al ahí se va y a ver qué sale, teniendo jugadores que estén en la cancha y se rompan la madre, con eso nos conformamos".
El aficionado José Manuel Valdés era un niño en esa época, cuando autobuses viajaban en caravana para transportar a los aficionados a los juegos de visita de los Tiburones Rojos: "Eran unas invasiones tremendas a la Ciudad de México y Puebla", dice.
Valdés agrega que una de las características de la afición veracruzana es que no pide títulos pero sí esfuerzo, ya que en su historia solo han ganado dos campeonatos de liga (1945-1946 y 1949-1950) y “no se puede extrañar lo que no se tiene”.
De acuerdo con Kuri Grajales, Veracruz es una de las “plazas” más rentables para el negocio del futbol. En su estadio Luis Pirata Fuente, que tiene capacidad para 30,000 personas, han pasado cinco franquicias.