Brasil 2014, un Mundial 'más o menos' previsto por las casas de apuestas
¿Sabíamos que así sería el Mundial de Brasil 2014? Las casas de apuestas dicen que "más o menos". Un más o menos que se acerca al sí, porque de entre los cuatro semifinalistas, tres eran los favoritos para llevarse la Copa; un más o menos que se acerca al no, porque el campeón no será el que todos los apostadores creían que sería: Brasil.
El 12 de junio, cuando el pentacampeón del mundo escuchó el silbatazo inicial en el partido inaugural contra Croacia, arrancó su aventura para ganar su primer Mundial en casa, no solo con el respaldo de millones de brasileños y el deseo de limpiar la historia del maracanazo, también con el apoyo de los expertos en apuestas deportivas.
Todas las casas de apuestas marcaban como favorito a Brasil, lo veían como la opción segura y, por lo mismo, ofrecían el más bajo premio en caso de que se coronara.
BetCRIS pagaba 2.85 dólares de premio por cada dólar apostado por el Scracth du Oro para campeón; menos que los entre 3.0 y 6.5 dólares que ofrecía esta casa si ganaba Argentina, Alemania o España, los siguientes tres favoritos.
Fase de grupos
En la primera fase del Mundial hubo pocas sorpresas, principalmente dos: el primer lugar de Costa Rica en el grupo D y la eliminación de España en el B; aunque también la clasificación de Grecia, Estados Unidos y Argelia, rompieron los pronósticos de las casas de apuestas.
La selección española era el claro favorito para llevarse la primera posición del grupo B, si esto hubiera sucedido, quien hubiera apostado un dólar se habría llevado un premio de 1.4 dólares; mientras que quienes pusieron su dinero en que Chile pasaba a la segunda ronda, se llevaron 4.5 dólares por cada dólar apostado, según puede verse en el sitio web especializado en apuestas de futbol soccer.oddsshark.com .
Para establecer los momios –los premios ofrecidos por cada apuesta–, los expertos de las casas de apuestas consideran muchos factores: la historia pasada y reciente de cada equipo y de los enfrentamientos entre ellos, las noticias sobre la situación específica de los equipos, el clima, si juegan de local, y un gran etcétera... Aún así, para los expertos era difícil anticipar que Robin van Persi y Arjen Robben le propinarían a la campeona del mundo en su debut un 5-1, y que Chile la remataría con un 2-0 que le dio el pase a la siguiente ronda.
También les era difícil prever que un equipo formado por 11 jugadores prácticamente desconocidos iba a terminar la primera fase en primer lugar del grupo D. Quienes confiaron en que Costa Rica superaría a tres campeones del mundo como Italia, Uruguay e Inglaterra, se llevaron cerca de 2,000 dólares por cada 100 apostados.
En el resto de los grupos más o menos sucedió lo que podía leerse en los momios: en el A, Brasil pasó primero y México segundo (las casas apostadoras ponían a la Selección Nacional y a Croacia muy parejos para este propósito); en el C, Colombia cumplió las expectativas y Grecia sorprendió a los apostadores.
En el E, se cumplió la expectativa de que calificaran Francia y Suiza, en ese orden; en el F, Argentina con paso invicto no representó ninguna sorpresa, mientras que Nigeria hizo ver a los apostadores que habían errado al preferir a la debutante Bosnia.
En el G, Alemania cumplió los pronósticos, pero Estados Unidos fue “la chica” al pasar por encima de Portugal y Cristiano Ronaldo; y, en el H, Bélgica no asombró a nadie terminando invicta la primera fase, lo que no se esperaba era que Rusia quedara fuera, pero mucho menos que Argelia fuera la calificada, quien apostó por esta opción ganó 30 veces lo invertido.
El quinto partido
Muchos mexicanos dejaron volar las ilusiones tras el buen juego desplegado por la Selección Nacional en la fase de grupos, y la veían ya en semifinales, pensando que podría superar a la naranja mecánica en octavos y después a Costa Rica o Grecia en cuartos.
Las casas de apuestas no es que supieran que la aventura azteca en suelo brasileño acabaría por un #NoEraPenal , tal vez lo que consideraban es que en los últimos cinco mundiales la Selección Mexicana había llegado, pero no había superado la fase de octavos.
Así, México mejoró en los pronósticos, si al inicio del Mundial se ofrecían cerca de 130 dólares por cada dólar apostado a que los aztecas conquistaban la copa, previo al partido de octavos ofrecían ya sólo entre 31 y 35 dólares, en páginas de apuestas como BetCRIS y Bet365.
Y en el duelo de octavos, aunque las diferencias no eran abrumadoras, las casas de apuestas ponían como favorito a Holanda contra México: si los verdes hubieran ganado, quienes por ellos apostaron habrían ganado alrededor de 3 dólares por cada uno invertido, mientras que los que fueron con Holanda recibieron aproximadamente 2.10 dólares por cada dólar apostado.
En el resto de los partidos de octavos se dio lo que esperaban los apostadores: Tras la primera frase de Costa Rica, los ticos hicieron buenos los pronósticos y eliminaron a Grecia; de manera similar, Colombia despachó a Uruguay, Francia a Nigeria, Argentina a Suiza, Bélgica a Estados Unidos y Brasil a Chile.
Si algo causó sorpresa en octavos fue que Alemania –sí, la misma Alemania que después golearía 7-1 a Brasil– tuviera problemas para pasar por encima de Argelia. Quienes apostaron porque los germanos y los argelinos terminarían en el tiempo regular empatados ganaron entre 47.5 y 57.5 veces lo apostado.
Se van haciendo menos
Ya cuando quedaban ocho equipos, las cosas estaban casi igual que al iniciar el torneo: Brasil seguía siendo el favorito. La casa de apuestas Bet365 pagaba 3.75 a 1 el campeonato de los amazónicos, y BetCRIS 2.9 a 1.
Con Costa Rica, a pesar de estar invictos y de ser la revelación del torneo, los momios no reflejaban confianza en que pudieran superar los cuartos de final contra Holanda; si los ticos hubieran ganado a los holandeses, apostar por ellos habría pagado entre 5.4 y 6.7 veces lo invertido; en ese momento, apostar por Costa Rica para campeón del mundo, ofrecía un premio de más de 60 dólares por cada billete verde apostado.
Para esta etapa, BetCRIS ponía a Alemania como el tercer favorito con un premio de 4.45 dólares por dólar apostado; y Bet365 lo ponía como cuarto con 6 dólares por cada dólar invertido.
En esta fase el resultado que mejor pagó fue el empate en tiempo regular entre Holanda y Costa Rica que dio entre 3.2 y 3.6 veces lo invertido; el triunfo de Alemania sobre Francia pagó 2.2 veces lo apostado, el de Brasil sobre Colombia 1.3 veces y el de Argentina contra Bélgica 1.1 veces.
Ya en semifinales, las casas de apuesta veían las cosas más parejas: Argentina era favorito sobre Holanda y Brasil sobre Alemania. En el caso de los anfitriones, estos centros de juego ofrecían sólo un premio 1.5 y 1.6 veces lo invertido si Brasil ganaba, mientras que pagaban entre 1.8 y 2.1 veces lo apostado si Alemania se alzaba como vencedor.
Pero pocos imaginaban que los germanos borrarían de la cancha a los amazónicos y los humillarían con un marcador de 7 a 1. Los pocos que se arriesgaron por un resultado así de abultado, se vieron recompensados: la casa de apuestas británica Paddy Power reportó que uno de sus usuarios eligió este marcador, por lo que ganó cerca de 55,000 pesos luego de invertir 100 pesos ; asimismo, la también británica William Hill, difundió que ninguno de sus 120,000 clientes apostó por el 7-1, pero uno sí anticipó el 5-0 con el que cerró el primer tiempo entre teutones y brasileños, por lo que recibió un premio de 6000 pesos, tras apostar sólo 20 pesos.
La final
Para la final, las apuestas ponen ya como favorito a Alemania, creen que el resultado más probable es un 1-0 a favor de los germanos y que el gol lo anotará Thomas Müller.
Al equipo alemán poco le importará que quienes apuesten por ellos ganarán entre 1.1 y 1.3 veces lo invertido; a la albiceleste tampoco le quita el sueño que quienes inviertan en ellos se lleven un premio de entre 2.5 y 2.6 veces lo apostado.
Alemania va por su cuarto título; Argentina por su tercero; Miroslav Klose quiere seguir incrementando su marca como el mejor goleador en la historia de los mundiales; Lionel Messi, quiere dejar claro que es el mejor del mundo, quiere convertirse en leyenda; ambos tienen un partido para hacerlo.
Es sólo un partido. ¡Hagan sus apuestas!