Banxico refuerza su ayuda al peso
El banco central de México vendió este jueves dólares directamente a bancos por segundo día consecutivo, en un intento por frenar el desplome del peso luego de que su mecanismo de subastas no lograra seducir a los inversores, dijeron fuentes del mercado.
Tras las ventas, el peso en su valor referencial a 48 horas, cerró con una apreciación de un 1.44%, a 14.2620/14.2650 pesos por dólar.
El banco central había intervenido el miércoles para fortalecer al peso, que ha tocado niveles históricos de debilidad esta semana, golpeado por la crisis financiera en Estados Unidos y las grises perspectivas económicas locales.
Aunque la entidad reconoció haber hecho operaciones, no aclaró cuánto vendió ni a que precio, pero dijo que las ventas de divisas se reflejarían en el nivel semanal de reservas.
De acuerdo con un reporte del banco UBS, el banco central podría haber vendido el miércoles hasta 1,500 millones de dólares y, según medios locales, el precio promedio habría sido de alrededor de 14.46 por dólar.
La sorpresiva jugada del banco central fue la primera de este tipo en una década, porque la entidad suele intervenir en el mercado cambiario con subastas ordinarias de 400 millones de dólares y con otras extraordinarias, para las cuales lanza convocatorias públicas.
El jueves, el banco central volvió a llamar directamente a instituciones bancarias para pedir posturas de compra y venta y realizó operaciones que reforzaron el nivel del peso.
Una fuente del banco central dijo el jueves a Reuters que la entidad no tenía mayor información para ofrecer al mercado.
"Sabemos que gente del Banco ha hablado a los bancos a explicarles lo que hizo y va a seguir haciendo (...), básicamente dijo que no está dispuesto a permitir que sigan especulando contra el tipo de cambio", dijo un operador.
Desde hace meses, el peso viene sufriendo por la crisis financiera en Estados Unidos -el vecino y mayor socio comercial de México- mientras las perspectivas económicas se oscurecen y sube el temor entre los inversores, que han estado migrando su dinero a activos más seguros fuera de los mercados emergentes.
El peso ha perdido cerca de un 3.6% frente al dólar en lo que va del año y un 21% en el 2008.
Los analistas temen que una persistente depreciación de la moneda avive la inflación y no le deje margen al banco central para bajar las tasas de interés, algo clave para impulsar a la deprimida economía, que está sufriendo los efectos de la desaceleración en Estados Unidos.
Por eso el banco central busca estabilizar a la moneda, según los especialistas.
"Dada la falta de efectividad del mecanismo de intervención basado en reglas de 400 millones de dólares, el banco central ahora parece estar listo para establecer un patrón de intervención menos predecible", dijo el banco Goldman Sachs en un reporte.
"El agudo debilitamiento del peso le presenta a las autoridades un dilema de política, porque una moneda que no está bien anclada podría desacelerar el ritmo del necesario relajamiento de la política monetaria", agregó.
Desde octubre pasado, el Banco de México ha vendido cerca de 17,000 millones de dólares de reservas para fortalecer al peso, pero aún sigue recibiendo un buen flujo de dólares gracias a sus exportaciones petroleras. Las reservas se ubicaron en 83,631 millones de dólares hasta el 30 de enero.
El banco central redujo el mes pasado, por primera vez en casi tres años, la tasa de referencia en 50 puntos base a un 7.75%, pero la debilidad del peso puso en duda la rapidez con la que la entidad podría seguir recortando las tasas.
De acuerdo con la autoridad monetaria, la economía mexicana podría contraerse hasta un 1.8% este año.
