Publicidad
Publicidad

El mito de la repatriación de ganancias

Bajar impuestos ayudaría a que las firmas inviertan en EU sus ingresos extranjeros, dicen analistas; sin embargo, hasta el 75% de estas ganancias ya se destinan a activos estadounidenses.
mié 10 julio 2013 04:30 PM
Si sólo se reducen los gastos en 1.5 bdd, la deuda acumulada aún estará en vías de crecer a más la economía.  (Foto: Photos to Go)
dolar deuda comite estados unidos (Foto: Photos to Go)

El siguiente argumento es muy común en el debate sobre el impuesto de sociedades: si la tasa impositiva máxima no fuera tan alta, las empresas multinacionales estadounidenses estarían encantadas de traer a casa el dinero que acumulan en el extranjero. Y esa repatriación acarrearía una mayor inversión en la economía de Estados Unidos .

Las multinacionales estadounidenses tienen 1.8 billones de dólares en lo que se denomina "beneficios reinvertidos en forma permanente" en el exterior. Si fueran llevados de vuelta -un proceso conocido como repatriación- el dinero se gravaría a una tasa de 35% menos cualquier impuesto que la empresa ya haya pagado por él a un Gobierno extranjero.

Pero es un mito que todo el dinero esté "atrapado" en el extranjero, explica el experto fiscal Edward Kleinbard. Y no está claro hasta qué grado espolearía la economía si fuera repatriado.

Tal como es ahora, una parte significativa de esos 1.8 billones de dólares ya está "trabajando" en Estados Unidos, aunque no necesariamente en la mejor manera para la economía, señaló Kleinbard.

He aquí por qué: las filiales extranjeras de las empresas suelen colocar las ganancias no utilizadas en bonos estadounidenses, acciones y depósitos bancarios. Ese dinero, en esencia, está ayudando a financiar la deuda federal y la deuda corporativa y también sirve para los préstamos bancarios a las empresas estadounidenses.

Un estudio de 2011 sobre 27 grandes compañías estadounidenses, solicitado por el senador demócrata Carl Levin, encontró que en promedio el 46% de las ganancias obtenidas en el extranjero (alrededor de 250,000 millones de dólares) se depositaban en cuentas bancarias en Estados Unidos o eran invertidas en activos estadounidenses, como bonos y fondos mutuos. Alrededor de un tercio de las compañías tenían por lo menos 75% de sus ganancias extranjeras en activos estadounidenses, reveló el estudio.

Publicidad

Para Washington, la forma de gravar ese ‘dinero offshore' es una de las cuestiones más espinosas que enfrentan los políticos que piden una reforma del impuesto de sociedades.

Hay un amplio consenso en que la tasa del 35% del impuesto de sociedades debe reducirse, si bien qué tanta reducción es la adecuada sigue siendo un punto importante de fricción.

Además, hay una presión bipartidista a favor de una forma de reducción fiscal para la repatriación de capital. Es decir, una tasa impositiva aún más baja para las ganancias extranjeras previas.

El exsecretario del Tesoro, Larry Summers, por ejemplo, ha propuesto una tasa de repatriación de 15% para las ganancias acumuladas en el exterior.

En cambio, el presidente de la comisión House Ways and Means Committee Dave Camp ha propuesto una tasa de 5.25% para las ganancias acumuladas antes de este año.

"El problema es que (las empresas) pagarían eso ya sea que repatríen o no las ganancias," sostiene Jeremy Scott, director de Tax Notes.

Una tasa provisional de 5.25% también se impuso en 2004 durante una exención temporal en la repatriación sólo vigente durante un año. Aunque la medida suscitó que una oleada de dinero volviera al territorio estadounidense, los estudios han demostrado que no produjo un fuerte impacto económico.

"Las grandes repatriaciones de efectivo que siguieron a esa exención fiscal temporal en términos netos financiaron los dividendos de accionistas y las recompras de acciones, no las inversiones estructurales en la economía real de Estados Unidos," afirmó Kleinbard en una comparecencia ante el Congreso el mes pasado.

En otras palabras, los inversionistas de las empresas fueron los grandes ganadores.

Por su parte, Kleinbard espera que los legisladores fijen la tasa de repatriación lo suficientemente alto como para ayudar a pagar por la posible pérdida de ingresos recaudatorios que se produciría si se reduce la tasa del impuesto de sociedades sobre ganancias futuras y otros costos asociados con la reforma fiscal.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad