Padrés y Medina, "bajo la sombra" de investigaciones
Los exgobernadores de Sonora, Guillermo Padrés y de Nuevo León, Rodrigo Medina, están en la mira de indagatorias por presunta corrupción.
En el caso del exmandatario de Sonora, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) presentó 30 denuncias en contra de servidores públicos locales que trabajaron durante su gobierno por posibles irregularidades en beneficio de 574 contribuyentes, con auditorías irregulares.
A Padrés –del Partido Acción Nacional (PAN)– no se le acusó porque no tenía atribuciones respecto a la dirección, supervisión o firma de actos en materia fiscal, explicó el titular del SAT, Aristóteles Núñez. Sin embargo, dijo, serán las autoridades estatales las que definan hasta que nivel llega el deslinde de responsabilidades.
Las acusaciones se presentaron después de que, el pasado 19 de noviembre, el SAT determinó quitarle al gobierno de Sonora las facultades de fiscalización —hasta el fin de año— tras detectar que se benefició a 574 contribuyentes a través de 829 auditorías, realizadas por la entonces Dirección General de Auditoría Fiscal del Estado de Sonora.
La dependencoa federal exigió al gobierno de Sonora un reembolso de más de 100 millones de pesos . "Lo anterior fue el resultado de un proceso que inició a principios del presente año, derivado de 3 denuncias anónimas", detalló el SAT.
A lo anterior, se sumó que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) detuvo el domingo pasado en Hermosillo a uno de los empleados de la familia Padrés, Luis Arístiga López Moreno, que en su vehículo tenía 3 millones 500,000 pesos en efectivo.
“El inculpado manifestó ser médico veterinario zootecnista y empleado y administrador de algunos negocios propiedad de los señores Guillermo y Miguel, ambos de apellidos Padrés Elías, entre los cuales se encuentra el llamado Rancho Pozo Nuevo”, apuntó el procurador estatal Rodolfo Montes de Oca.
A López Moreno lo encarcelaron en el Centro de Readaptación Social (Cereso) Hermosillo Uno, por la acusación de narcomenudeo, ya que tenía cinco envoltorios de la droga cristal, y la acusación por operaciones con recursos de procedencia ilícita se sigue integrando en otro expediente.
“Aquí no se fabrican culpables y no se exoneran culpables, de ninguna manera”, dijo respecto a las indagatorias en torno a la administración de Padrés la actual gobernadora, la priista Claudia Pavlovich, elegida en los comicios del 7 de junio pasado y que comenzó a gobernar el 13 de septiembre, con una deuda de 20,365 millones de pesos, y por la que dijo recibir un estado casi en quiebra.
Las autoridades han cateado dos domicilios y una bodega de la familia del exmandatario sonorense, en los que se aseguraron más de 30 cajas con documentos y equipo de cómputo. "Los estamos revisando (los documentos) con mucho detenimiento para poder utilizar esa información para llegar al esclarecimiento de estos hechos; les puedo decir que es información muy relevante”, dijo Montes de Oca.
Nuevo León y Medina
En Nuevo León, el gobernador independiente Jaime Rodríguez Calderón el Bronco anunció que tiene identificados 100 presuntos actos de corrupción, en los que dice estaría involucrada la administración del priista Rodrigo Medina, recién concluida.
De acuerdo con el Bronco, Medina (del Revolucionario Institucional) tenía contratistas y medios de comunicación favoritos, a los que destinó montos exagerados. En cuanto a obra pública, dijo, en algunos casos se dejaron proyectos inconclusos. “Tenemos obras, desde el huracán Alex, del huracán Ingrid, que se cobraron y no se hicieron”, acusó.
Otra acusación directa del primer independiente elegido para gobernar un estado en México, es la de que la administración de Medina incurrió en un desvío de recursos del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado de Nuevo León (ISSSTELEON), por un monto de mil millones de pesos.
“Es un desvío del gobierno. Ese dinero no debió haberse usado para otras cosas. Fue usado por el gobierno anterior, para cosas que no debían de ser, aportaciones de los trabajadores”, mencionó Rodríguez Calderón. Con esos presuntos desvíos, agregó el mandatario estatal, el ISSSTELEON “ha sido quebrado”.
Para indagar los 100 presuntos casos de corrupción, y acabar con ese "cáncer", el Bronco informó sobre la creación de una subprocuraduría, bajo el mando de Ernesto Canales, y que recabará evidencia hasta presentar en febrero las denuncias correspondientes.
Con información de Notimex