Lo que debes saber sobre la Red Compartida Mayorista
Este viernes se publican las reglas para participar en la Red Compartida Mayorista, considerada por autoridades y expertos como el proyecto más trascendente en la historia de las telecomunicaciones en México.
El plan es encabezado por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y promete ampliar y mejorar los servicios de telecomunicaciones y bajar los precios al consumidor final.
Pero de qué trata, cómo se beneficiarán los usuarios y por qué debieron cambiar sus televisiones analógicas por digitales, aquí te explicamos el proyecto de forma breve.
La joya de la corona
Con el apagón analógico y el paso a la televisión digital terrestre , se liberó el espectro de la banda de 700 MHz, considerada para la prestación de servicios móviles, como Internet, telefonía y televisión vía Internet.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) debe asignar al menos 90 MHz de esa banda para la Red Compartida, que se destinará a la comercialización de capacidad, infraestructura o servicios de telecomunicaciones al mayoreo, es decir entre los operadores de telefonía e Internet.
“No habrá una relación con usuarios individuales, sino que los usuarios de la Red serán los concesionarios; será una asociación público-privada y que va a estar conducida por el Estado”, explica Ramiro Tovar, consultor independiente en regulación y competencia económica.
“(El proyecto) tiene por lo menos 90 Mhz de la banda de 700, el despliegue de fibra óptica que actualmente tiene Telecomm (organismo público descentralizado) y tendrá un agente privado por definir que se encargará del funcionamiento, diseño y despliegue de la red”, agrega el también profesor en el Instituto Tecnológico Autónomo de México.
La presidenta de Observatel, Irene Levy, opina que la Red será muy favorable porque con una menor inversión se cubrirá cinco veces más que con la banda que actualmente se usa para los servicios móviles, la de 1.7 Ghz.
“Es la joya de la corona por el momento, pues tiene mucha cobertura, que permitirá llegar hasta donde las empresas no han podido o querido llegar, y permeabilidad; es decir, penetra paredes”, asegura.
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¿Un parteaguas en la competencia?
Al no competir por hacerse de más usuarios finales, los grandes operadores venderán sus servicios a otras carriers; es decir, permitirán el uso de sus redes. Esto es un incentivo para darle buenas condiciones a un ‘competidor’, según Levy.
El usuario final tendrá más opciones para elegir proveedores y una mejor calidad en los servicios que contrate, destaca.
“Al tener más carriers consumiendo el insumo de manera equitativa y a precios accesibles y en condiciones similares, habrá más incentivos para que más carriers participen y se bajen los precios. Tú como usuario tendrás más opciones, a mejores precios y mayor calidad”, afirma.
De hecho, uno de los objetivos del Gobierno federal es “promover precios competitivos”, pero no está claro si las bases de licitación definirán las reglas para lograrlos.
“Si se planea bien, seríamos uno de los pocos países en el mundo que pensaron en que todo el espectro de la banda de 700 Mhz no sea licitado a operadores ya existentes, sino que sea licitado en un proyecto para una Red Mayorista que dé servicios a su vez a otros operadores para que tengan acceso a este insumo”, apunta Levy.
No obstante, Ramiro Tovar cuestiona si se trata del mejor modelo para los usuarios finales considerando que el contexto económico actual puede desanimar a los interesados.
“Si la volatilidad económica continúa, podrían subir los precios y el beneficio social sería muy poco”, afirma.
“El mayor beneficio sería que esta Red sea usada para llevarla a las zonas carentes de infraestructura, pero ese criterio disminuye la rentabilidad”, considera.
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¿Qué sigue?
La apertura de ofertas tendrá lugar durante el primer semestre de este año; el fallo, adjudicación y firmas de contratos en el segundo semestre; el inicio de operación de la red en el primer trimestre de 2018 y la cobertura objetivo del 98% de la población debe alcanzarse en 2023, de acuerdo con el calendario presentado por SCT.
En septiembre de 2015, el IFT y la SCT publicaron las prebases de la licitación , que si bien son de carácter preliminar y sujetas a modificaciones, dan una idea del diseño que tiene en mente el Gobierno para la Red.
En las bases se deberán definir varios puntos sobre el futuro de la Red, cómo se utilizará la red troncal de fibra óptica —que la Comisión Federal de Electricidad cedió a Telecomm— si se podrá subarrendar el espacio radioeléctrico a otros operadores o no y las contraprestaciones, entre otros.
Tovar considera que los tiempos establecidos por el Gobierno le han restado flexibilidad al proyecto, lo que no necesariamente implica la mejor explotación del insumo.
“El grado de detalle con el que se estableció la reforma de telecomunicaciones actualmente impide que se busque alguna otra modalidad para la mejor explotación de esos al menos 90 Mhz. Estas circunstancias limitan a los concesionarios para darle otro giro al uso de la red”, concluye el especialista.