El ‘fantasma’ del góber Marín recorre precampañas de Puebla
El fantasma del exgobernador Mario Marín Torres (2005-2011) recorre las precampañas en Puebla.
La imagen de quien brincó a la fama como el góber Marín por su presunta participación en las violaciones a las garantías básicas de la periodista Lydia Cacho Ribeiro, en 2006, es utilizada por los opositores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para atacar a su virtual candidata, Blanca Alcalá Ruiz.
La senadora con licencia tuvo una semana complicada. Quizá su error fue incluir al exmandatario entre sus invitados especiales, el pasado 21 de febrero, cuando se registró como precandidata de unidad del PRI.
Marín, protagonista de un escándalo mediático que incluyó acusaciones por corrupción, protección a una red de pederastia y abuso de poder, encabezó una caminata en las principales calles del centro de la capital poblana a favor de Alcalá en esa fecha, hecho que de inmediato causó reacciones, principalmente entre panistas y Cacho, quienes coincidieron en asegurar que quiere regresar al poder a través de la figura de la virtual candidata.
El caso sobre la periodista atrajo la atención pública en México en 2006, luego de que el periódico La Jornada divulgó una conversación telefónica entre el empresario Kamel Nacif y el entonces gobernador de Puebla, en las que el primero le agradece haber detenido y dado un "coscorrón" -un escarmiento- a Cacho, por haberlo relacionado a una red de pederastia en su libro Los demonios del Edén.
"Cómo se atreve @SoyBlancaAlcala, cómplice en mi tortura y secuestro legal a hacer campaña por #DH (derechos humanos) El caso "Góber Precioso" sigue abierto", fue el primer tuit que publicó la escritora mexicana en su cuenta de Twitter @lydiacachosi, cuando se enteró de la reaparición de Marín en escena pública.
Los panistas utilizaron el hashtag #MarinSeVisteDeBlanco para criticar que el PRI presumiera al exmandatario estatal como uno de sus cuadros importantes e hicieron alusión a que si Alcalá Ruiz gana las elecciones del próximo 5 de junio, Mario Marín estaría de regreso al poder.
“La candidata del #GoberPrecioso #MarinSeVisteDeBlanco. Los poblanos NO los queremos de regreso. ¡Entiéndanlo!”, fue uno de los comentarios que realizó en su Twitter el vocero del PAN local, Javier Lozano Alarcón. El senador también es coordinador de la campaña del virtual candidato del blanquiazul al gobierno estatal, Antonio Gali Fayad.
El deslinde
Un día después de que Cacho responsabilizara a Blanca Alcalá de haber sido cómplice de su tortura en el sexenio de Marín, la aspirante a gobernar Puebla se deslindó, y aunque en un inicio aseguró que no conocía a la periodista, después señaló que de ganar las elecciones del 5 de junio, no permitirá que en la entidad se repita un caso Lydia Cacho.
"Lamento que la política se use como un juego sucio, no conozco a Lydia Cacho y lamento las declaraciones que ha hecho", tuiteó el 23 de febrero.
Dos días después, el 25, cambió su discurso durante una rueda de prensa en el municipio de Teziutlán, en la sierra nororiental.
"Tendré que hacer el programa más exitoso que se haya hecho en el país para que no haya ni una Lydia Cacho más, pero sobre todo, para que no haya ningún tema que vulnere a las mujeres”, declaró.
Para el 28 de febrero, tras una semana de recibir críticas por su cercanía con Marín, Alcalá Ruiz ya no se hizo acompañar por él durante un evento masivo, en el que el líder nacional priista, Manlio Fabio Beltrones, le tomó protesta como la virtual abanderada.
La entidad fue gobernada durante más de 80 años por el PRI hasta que en los comicios de 2010 ganó Rafael Moreno Valle, postulado por una alianza del Partido Acción Nacional (PAN), Revolución Democrática (PRD), Nueva Alianza (Panal), entre otros, terminando así la era priista con el góber Marín.