El crédito para las empresas perderá fuerza en lo que resta del año

El crédito para las empresas se desacelerará en lo que resta del año como resultado de los aumentos en la tasa de referencia del Banco de México (Banxico) y menores expectativas de crecimiento económico.

“El crédito empresarial es uno de los componentes que es más sensible a los cambios en la tasa de referencia”, dijo a Expansión Mónica Díaz, analista de Ve por Más. “Si bien el impacto sigue siendo moderado, ya estamos viendo que el alza (de 25 puntos base) que hubo en diciembre sí ha tenido consecuencias”.

La especialista señaló que cualquier cambio en la tasa de referencia se refleja en aproximadamente seis meses en las tasas de los créditos para las empresas, por lo que habría un impacto en los siguientes meses al considerar que Banxico elevó la tasa en febrero y junio para llevarla al nivel actual de 4.25%.

Desde el año pasado, el saldo total de los préstamos que otorga la banca a las empresas creció a doble dígito hasta alcanzar una tasa de crecimiento anual de poco más de 20% en febrero.

Sin embargo, desde esa fecha se ha ido desacelerando para crecer a tasas de entre 14 y 15% de marzo a mayo, de acuerdo con cifras de Banxico. Los especialistas esperan que este rubro del crédito crezca aún a doble dígito pero ven poco probable que replique el pico que tuvo en febrero.

Parte de la desaceleración en los préstamos obedece también a las menores expectativas de crecimiento económico en el año. Por ejemplo, la mediana de los 34 grupos de análisis que consultó Banxico en junio apuntó a un crecimiento económico de 2.40% en 2016, una disminución frente al 2.45% que se había registrado en mayo. Por su parte, los analistas consultados por Banamex redujeron su expectativa de crecimiento a 2.30% desde 2.35%.

“En la medida que esperes un menor crecimiento económico vas a ser más cauteloso con tus planes de inversión”, dijo a Expansión Mariana Torán, economista principal de BBVA Bancomer.

Torán explicó que el tipo de cambio influyó también en el aumento de los créditos para las empresas ya que el 25% del saldo total vigente está denominado en moneda extranjera, y cuando el tipo de cambio se aprecia, esos saldos se incrementan. En ese periodo las empresas también sustituyeron créditos que tenían en el exterior por otros en el mercado nacional.

Sin embargo, a partir de marzo, algunas de ellas volvieron a financiarse en el exterior y con los créditos que obtenían afuera, liquidaban los préstamos en moneda nacional.

“Eso explica también la desaceleración que se observa. Una sustitución que ha habido a partir desde ese máximo que se vio en febrero”, agregó.