La economía de EU se desacelera al cierre de 2017
El crecimiento económico de Estados Unidos se desaceleró levemente más a lo estimado inicialmente en el cuarto trimestre de 2017 debido a que el ritmo más veloz de gasto del consumidor en tres años atrajo importaciones y agotó inventarios.
El Producto Interno Bruto (PIB) se expandió a una tasa anual de un 2.5% en los últimos tres meses de 2017, en vez de la cifra de 2.6% reportada previamente, dijo este miércoles el Departamento de Comercio en su segunda estimación del PIB.
El resultado estuvo en línea con estimaciones de analistas consultados en un sondeo de Reuters y marcó una desaceleración respecto al sólido ritmo de 3.2% del tercer trimestre de 2017.
La revisión a la baja en la estimación del PIB del cuarto trimestre reflejó en gran medida una menor acumulación de inventarios que lo informado previamente.
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El crecimiento en el primer trimestre suele ser más débil debido a una singularidad estacional, pero probablemente se acelerará durante el resto de 2018 en la medida en que se haga sentir el estímulo de un paquete de recorte tributario de 1.5 billones de dólares y el mayor gasto gubernamental.
Las estimaciones del PIB para los primeros tres meses de 2018 son tan bajas como un 1.8%.
El mercado prevé que la economía alcanzará la meta de crecimiento del gobierno del presidente Donald Trump de 3% este año, lo que posiblemente presionará a la Reserva Federal para elevar las tasas de interés en forma más agresiva a lo contemplado actualmente.
La Fed proyecta tres alzas de tasas para 2018 y los mercados financieros esperan el primer incremento de los tipos en la reunión de política monetaria de marzo. La economía estadounidense creció un 2.3% en 2017, una aceleración respecto al 1.5% del año anterior.
El crecimiento del gasto del consumidor, que responde por más de dos tercios de la actividad económica en Estados Unidos, se mantuvo sin revisión en una tasa de 3.8% en el cuarto trimestre, el ritmo más veloz desde el cuarto trimestre de 2014 y tras un 2.2% en el período julio-septiembre.
El dato de inflación preferido por la Fed, el índice de precios de gastos de consumo personal excluyendo alimentos y energía, subió a una tasa no revisada de 1.9%, la más veloz en un año y tras un incremento de 1.3% en el tercer trimestre.
