Trump prepara medidas contra inversión china en tecnología
El gobierno estadounidense de Donald Trump se prepara para anunciar medidas esta semana para reprimir la inversión china en tecnologías clave en Estados Unidos.
Se espera que la medida exacerbe las tensiones en el cada vez más intenso choque comercial entre Washington y Beijing.
Sugerimos: EU restringirá la inversión a países que tratan de robar su tecnología
Las planeadas restricciones de Estados Unidos sobre las inversiones chinas en “tecnología industrialmente significativa” son en gran parte impulsadas por las preocupaciones estadounidenses sobre “Made in China 2025”, el plan de Beijing para impulsar industrias como la robótica, los automóviles eléctricos y la industria aeroespacial, con el objetivo de convertirse en un líder mundial esas áreas.
Las medidas incluirán reglas que prohibirían a firmas con al menos 25% de propiedad china comprar empresas involucradas en tecnología considerada importante por la Casa Blanca, dijo este lunes una persona familiarizada con los planes a CNN. Eso incluirá los sectores aeroespacial, robótico y automotriz, agregó la persona.
El gobierno también está trabajando en nuevas reglas de exportación que impidan que esas tecnologías sean enviadas a China, dijo la persona.
Las restricciones fueron reportadas por primera vez el domingo por la noche por el Wall Street Journal.
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, dijo en Twitter que las restricciones no serían específicas contra China, sino que se aplicarían a “todos los países que intentan robar nuestra tecnología”.
La Casa Blanca ha dicho anteriormente que los detalles de las restricciones de inversión, así como los “controles de exportación mejorados” que limitan la adquisición de tecnología estadounidense por parte de los chinos, serán anunciadas el 30 de junio.
Las medidas son parte del mismo amplio movimiento estadounidense para confrontar las prácticas comerciales de Beijing, como los aranceles sobre 50,000 millones de dólares en productos chinos que el gobierno de Trump detalló a principios de este mes. Beijng prometió contraatacar en igual medida los aranceles, cuya primera ola entrará en vigor el 6 de julio.
El gobierno de Estados Unidos dice que la oleada de medidas contra China es una respuesta al robo de la propiedad intelectual estadounidense y la presión que enfrentan las empresas estadounidenses para que entreguen tecnología a las empresas chinas para poder hacer negocios en el país. Los funcionarios chinos han rechazado repetidamente las acusaciones de Estados Unidos, acusando a Washington de tomar medidas unilaterales y proteccionistas.
Lee: China advierte que guerra comercial afectará a trabajadores... ¡de EU!
El Wall Street Journal informó que las restricciones de inversión podrían aplicarse a acuerdos que involucran entidades en las que los inversionistas chinos tienen menos del 25% “si el gobierno determina que los inversores chinos podrían obtener la tecnología a través de asientos en los consejos, acuerdos de licencia u otras medidas”.
El informe dice que la industria estadounidense tendrá la oportunidad de comentar sobre los planes antes de que las reglas entren en vigor.
En respuesta al informe, el gobierno chino dijo que siempre alentaba a las empresas chinas a cumplir con las leyes locales y operar de acuerdo con los principios del mercado y las normas internacionales. Las compañías chinas han creado muchos empleos, han pagado muchos impuestos y han ayudado a las empresas estadounidenses a crecer, agregó.
“Esperamos que Estados Unidos pueda ver objetivamente las actividades comerciales de las compañías y cree un ambiente de inversión bueno, justo y predecible para las empresas chinas”, dijo a periodistas el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores, Geng Shuang.
Una ley de emergencia que probablemente sea usada
Expertos y reportes recientes en los medios dicen que es probable que el gobierno Trump use una ley de emergencia para imponer restricciones a la inversión sobre compañías chinas, citando razones de seguridad nacional.
Sugerimos: Las tecnologícas tienen un buen desempeño pese al temor de una guerra comercial
La Ley Internacional de Poderes Económicos de Emergencia de 1977, otorga al presidente autoridad para tomar ciertas medidas contra otro país durante una “emergencia nacional”.
La represión de las inversiones podría ser perjudicial, según los expertos.
“Estados Unidos se ha beneficiado enormemente de tener un régimen de inversión abierto”, dijo Phil Levy, alto miembro de economía global en el Chicago Council on Global Affairs, a CNNMoney a fines del mes pasado.
Pero las restricciones se producen en momentos en que las inversiones chinas en Estados Unidos disminuyen rápidamente. Se hundieron más del 90% en los primeros cinco meses de 2018 en comparación con el mismo periodo del año anterior, según un informe de la semana pasada de Rhodium Group, una firma de investigación que realiza un seguimiento de la inversión extranjera china.
Rhodium vinculó la fuerte caída a un escrutinio más estricto de las adquisiciones chinas por parte de los reguladores estadounidenses y las propias restricciones de China a las inversiones salientes.
Bajo el gobierno de Trump, los acuerdos respaldados por China han sido objeto de un escrutinio más agresivo por parte del Comité de Inversión Extranjera en los Estados Unidos, (CFIUS, por sus siglas en inglés) un panel interinstitucional presidido por el Departamento del Tesoro.
El comité evalúa ciertos acuerdos que podrían otorgar a un inversor extranjero el control de una empresa estadounidense en busca de riesgos de seguridad nacional.
En un caso de alto perfil, un intento de la empresa china de servicios financieros en línea Ant Financial, filial de Alibaba (BABA), de tomar control del servicio de transferencia de dinero estadounidense, Moneygram, fracasó luego de no obtener la aprobación del CFIUS.
Lee: El inicio de una guerra comercial con EU llega en un mal momento para China
El CFIUS también podría volverse aún más poderoso. Una legislación que expandiría la autoridad del CFIUS tiene el respaldo bipartidista en el Congreso y el respaldo de los principales funcionarios del gobierno de Trump.
Julia Horowitz, Alessia Grunberger y Nanlin Fang contribuyeron a este reporte.