Una medida del presidente estadounidense, Donald Trump, para imponer aranceles a los automóviles ensamblados en Europa escalaría drásticamente las tensiones comerciales y produciría una rápida respuesta por parte de la Unión Europea.
Trump amenazó con convertir a los automóviles en su próximo gran objetivo en una batalla comercial transatlántica el viernes, al decir que estaban en fila para un arancel del 20% si la Unión Europea no eliminaba sus propios aranceles y barreras comerciales.
“Si los aranceles y las barreras [de la UE] no son derribadas y eliminadas pronto, aplicaremos un arancel de 20% sobre todos sus automóviles importados a Estados Unidos. ¡Fabríquenlos aquí!”, dijo en Twitter.
Lee: Europa tomará represalias si EU impone aranceles a autos
Si Trump cumple esta amenaza, la Unión Europea estaría lista para devolver el golpe, según los analistas.
“Los automóviles son un gran negocio. Este es un negocio mucho más importante que el acero”, dijo David Henig, un ex negociador comercial del Reino Unido que trabajó en conversaciones comerciales con Estados Unidos.
Una cantidad total de automóviles por un valor de 38,000 millones de euros (44,000 millones de dólares) son enviados cada año desde la Unión Europea a Estados Unidos. Es el mercado de exportación más grande de una industria que constituye la columna vertebral de la manufactura en Europa.
“Desde ahora [los funcionarios de la UE] estarán revisando sus estadísticas” para descifrar cómo tomar represalias contra los aranceles estadounidenses sobre automóviles, dijo Henig.
Los analistas dicen que es probable que la Unión Europea trabaje con la misma estrategia que utilizó después de que Trump impuso aranceles al acero y al aluminio provenientes de Europa. Eso resultó en que 28 miembros de la UE impusieron unánimemente aranceles de represalia sobre bienes estadounidenses por valor de 3,000 millones de dólares la semana pasada.
Recomendamos: Aranceles de Trump a autos ponen en riesgo al sector global
1. Ofrecimiento de conversaciones mientras se preparan represalias
Considerando el tamaño del comercio en juego, y el daño potencial a las empresas europeas que también exportan automóviles desde plantas en Estados Unidos de vuelta hacia Europa, los funcionarios de la UE podrían comenzar ofreciendo un trato con Trump.
“Tratarán de agitar una zanahoria ante sus ojos”, dijo Henig.
El gobierno de Trump podría no estar dispuesto a jugar ese juego. La principal funcionaria comercial de Europa, Cecilia Malmström, dijo que ofreció a eliminar los aranceles automotrices de 10% del bloque durante las negociaciones sobre los aranceles de los metales, pero Estados Unidos se negó a participar.
Mientras tanto, la Unión Europea estaría trabajando para finalizar una lista de productos estadounidenses que podrían ser objeto de aranceles de represalia. Esa lista podría incluir productos químicos, aeroespaciales y agrícolas.
Lee: Trump lanza amenaza (por Twitter) a los autos europeos
2. Apuntar a las principales marcas y sectores agrícolas
La Unión Europea elegirá sus blancos de importaciones estadounidenses por un valor de aproximadamente 256,000 millones de dólares (299,000 millones de dólares) cada año.
“Los objetivos serán una combinación de marcas icónicas de Estados Unidos y productos agrícolas políticamente sensibles”, dijo Gregor Irwin, economista en jefe de Global Counsel.
Ross Denton, un experto en comercio y socio del despacho legal Baker McKenzie, sugirió que Boeing podría enfrentar aranceles debido a que es el mayor exportador de Estados Unidos y a que compite directamente con el europeo Airbus.
Los expertos dijeron que la Unión Europea también intentaría limitar el daño a sus propias compañías y consumidores al tiempo que busca una respuesta proporcionada. Eso podría resultar difícil debido al gran tamaño de las sanciones comerciales y debido a que las cadenas de suministro global están interconectadas.
Lee: Hecho en EU: Los autos alemanes que Trump no quiere
Las automotrices europeas, incluidas Volkswagen y BMW, tienen importantes fábricas en Estados Unidos, por ejemplo, y sus exportaciones a Europa se verán perjudicadas por los nuevos aranceles de la UE.
“El problema que enfrentará la Unión Europea es que se quedará sin objetos de represalias”, advirtió Denton.
3. Emprender acciones legales
Es probable que los funcionarios de la UE impugnen la legalidad de cualquier arancel estadounidense aplicado a los automóviles. Ya presentó una queja sobre los aranceles a los metales estadounidenses ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
“Estados Unidos ha intentado utilizar la amenaza de las restricciones comerciales como palanca para obtener concesiones por parte de la Unión Europea”, dijo la funcionaria de comercio de la UE Malmström, el mes pasado. “Esta no es la forma en que hacemos negocios, y ciertamente no entre socios, amigos y aliados de larga data”.
Los funcionarios de comercio de la UE se negaron a hacer comentarios para este artículo.
Lee: Un panorama difícil para las marcas Dodge y Chrysler
Henig sugirió que el costo económico de los aranceles de represalia —y la amenaza de una mayor escalada— podrían alentar a la Unión Europea a moderar su respuesta.
“La Unión Europea no querrá hacer nada que realmente dañe la economía y la industria”, dijo. “La mejor respuesta podría ser hacer algo simbólico y no exagerar”.