El economista en jefe de BofA, Carlos Capistrán, dijo que la recuperación de Estados Unidos está ayudando a la economía mexicana, lo que hace creer que la economía tendrá un ligero crecimiento en el segundo semestre del 2020.
"Esperamos una débil recuperación para México debido principalmente a razones internas: con pruebas limitadas de COVID-19, estímulos fiscales limitados y una tasa de interés relativamente alta. La velocidad de recuperación también dependerá de factores externos como la disponibilidad de una vacuna o un tratamiento para el coronavirus así como la velocidad a la que se recupere la economía estadounidense", destacó el economista de BofA.
El análisis de Capistrán también destaca que dependiendo de cómo se recupere la economía estadounidense, daría un empujón a México por la relación comercial entre ambos países.
"El sector manufacturero representa el 16% del PIB y la mayoría de las exportaciones de manufacturas van a Estados Unidos. Otro sector importante es el turismo, que representa una gran contribución de los ciudadanos estadounidenses que visitan México cada año", destaca BofA.
Además, las remesas que envían mexicanos en Estados Unidos a México son una importante fuente de dólares que impulsa el consumo en México. "Las remesas son casi el 3% del PIB y el 4.5% del consumo, y tienen un efecto multiplicador ya que sus destinatarios suelen ser pobres y restringidos y, por lo tanto, tienen una gran propensión a consumir", señaló Capistrán.
Además, se redujeron las expectativas de que el país pierda el grado de inversión. En julio pasado, el 77% de los encuestados aseguraba que el país perdería el grado de inversión mientras que la encuesta más reciente arrojó que solo el 64% ve esta posibilidad.
A nivel mundial, los temores giran en torno a las materias primas de China, la desaceleración económica en Estados Unidos así como la elección presidencial que se hará en noviembre próximo.