Malas noticias para el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y para la deuda mexicana: el Banco de México (Banxico) anunció este viernes que este año no habrá remanentes derivado de sus operaciones financieras y revaluación de activos.
La entidad liderada por Alejandro Díaz de León informó que no hubo remanentes de operación que el gobierno federal esperaba destinar al pago de deuda.
"Derivado de las aplicaciones descritas al resultado del ejercicio 2020, en apego a lo establecido en la Ley del Banco de México, no fue posible asignar recursos a la reserva de revaluación de activos, ni resultó un remanente de operación", informó Banxico.
Los remanentes son recursos que provienen del saldo positivo que resulta de las operaciones que hace el banco central. En función de estos movimientos, se hace un corte al cierre del año y se entrega a la Tesorería de la Federación.
Banxico destacó que las importantes fluctuaciones del tipo de cambio en 2020 ocasionaron variaciones relevantes en los resultados y en las reservas de capital que se reportaron mensualmente a lo largo del año como parte de su capital contable.
El organismo explicó que las reservas de capital alcanzaron su máximo nivel del año en los estados financieros al 30 de abril, cuando el tipo de cambio FIX de la moneda nacional frente al dólar se ubicó en 23.9283 pesos y dichas reservas de capital ascendieron a 918,279 millones de pesos.
Sin embargo, hacia el cierre del año, el tipo de cambio FIX registró una apreciación significativa en relación con los niveles máximos, alcanzando un valor de 19.9087 al 31 de diciembre, lo cual redujo el valor en moneda nacional de los activos internacionales incluidos en el balance del Banco de México, así como el de una amplia gama de pasivos denominados en moneda extranjera, tanto del sector público como privado.
La falta de recursos extra para el gobierno federal significa una mala noticia para las finanzas públicas, las cuales han estado presionadas por una caída en los ingresos derivados de la crisis del COVID-19.
