¿Más dinero igual a más medallas?
Hasta ahora, todo indica que un mayor presupuesto trae mejores resultados. En los últimos 16 años, el 2012 —los Juegos Olímpicos de Londres— fue el mejor año en términos de monto del presupuesto para la Conade, cuando se le asignó 6,147.4 millones de pesos. Durante esas competencias, los atletas mexicanos obtuvieron 8 medallas, su mejor desempeño en la historia.
No se trata solo de ganar medallas. Organismos internacionales han promovido la inversión en el deporte como una vía para el desarrollo. “El deporte puede desempeñar un papel importante para impulsar la integración social y el desarrollo económico en diferentes contextos políticos, geográficos y culturales. (...) También puede incentivar la acumulación de capital, facilitar el funcionamiento de los mercados y fortalecer a las instituciones a través de su efecto sobre el capital social, la confianza, la cultura y la delincuencia”, señala el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en su publicación ‘Deporte para el desarrollo’.
De acuerdo con el organismo, un ejemplo de ello es que un alto capital social reduce los niveles de delincuencia y mejora la salud de la población, que a su vez disminuye la necesidad de gasto público en temas de seguridad y los costos de salud, lo que libera recursos que se pueden usar para otros fines.
La baja inversión en deporte no es un tema único de México, sino de Latinoamérica. De acuerdo con el BID, el gasto en deportes asciende en promedio al 0.1% del Producto Interno Bruto (PIB) de cada país, un tercio del gasto en deportes en Europa. Entre los cinco países que más medallas han ganado en la historia de los Juegos Olímpicos, se encuentran tres naciones europeas: Rusia, Reino Unido y Alemania.
Ya lo dijo el clavadista Romel Pacheco en una entrevista con Expansión hace cinco años: para que México logre más éxito en los Juegos Olímpicos, “faltan más entrenadores, más escuelas, más estudio, más metodología aplicada hacia el deporte, mejores sueldos a los entrenadores, que haya más centros para hacer deporte, copiar modelos de ciertos países. El deporte es una inversión, es una inversión muy grande, pero no se debe ver como un gasto. El deporte de alto rendimiento ayuda al deporte en general: la gente lo ve, y eso la motiva a hacer deporte”.