"Salimos de la hiperinflación, pero las altas y persistentes inflaciones van a continuar por más tiempo. Es posible que termine siendo igual la más alta del mundo este año", dijo a la AFP el economista José Manuel Puente, profesor titular del Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA).
La inflación de junio, por ejemplo, "es mayor al promedio de toda América Latina en un año", subrayó Puente.
El privado Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), de tendencia opositora, reflejó una inflación de 14.5% en junio que representa una "cifra récord para el año 2022". Para ese mes, "la inflación anual aumentó a 170% y la acumulada del año al 53.8%".
Mientras que para julio, el OVF estimó la inflación en 5.3%, casi dos puntos por debajo que el BCV.
"La inflación mensual del mes de julio fue de 5.3%. En términos anuales la variación de precios es de 139% con un acumulado en el año de 62%, ubicándose entre las más altas del mundo", publicó el observatorio.
No obstante, "la economía va a crecer ese año por varios factores, siendo uno de los más importantes el aumento de precios del petróleo asociado a la guerra en Ucrania, lo que hará que los ingresos petroleros se dupliquen", indicó Puente.
Sin embargo, aclaró, "hay muchas dudas sobre la calidad de ese crecimiento y su sostenibilidad en el tiempo".
En Venezuela el salario mínimo aumentó en marzo a 126 bolívares, el equivalente actual a unos 21 dólares a la tasa oficial. Al momento del incremento, que fue de 1,700%, representaba 28 dólares.
El ingreso mínimo vigente es insuficiente si se considera que un kilo de carne de res puede costar unos 7 dólares, e incluso más, según la región del país.
El OVF calculó la canasta alimentaria de julio en 392 dólares.