El ajuste anunciado es similar al esperado por el mercado.
Los últimos acontecimientos sugieren que el próximo año puede ser un poco menos difícil de lo que se pensaba", escribió esta semana Nathan Sheets, economista jefe mundial de Citi, señalando que los riesgos de recesión están disminuyendo a nivel mundial, mientras que los datos de Estados Unidos "apuntaban a un crecimiento continuo, una inflación moderada y un ritmo más lento de subidas de tasas de la Fed".
Antes de la reunión de dos días de la Fed, el Fondo Monetario Internacional aumentó sus perspectivas para una economía mundial que, según sus funcionarios, demostró ser "sorprendentemente resistente" ante el endurecimiento de la política monetaria y la guerra en curso entre Rusia y Ucrania.
Los responsables de la política monetaria insisten en que no cometerán el error crucial de suspender las alzas hasta que estén convencidos de que la inflación está en una senda duradera hacia el objetivo del 2%.
Algunos analistas esperan que la entidad elimine de su declaración política la actual promesa abierta de "continuas subidas" de las tasas, una frase utilizada desde que el banco central inició su ciclo de endurecimiento en marzo. Sin embargo, cualquier nueva formulación dejaría la puerta abierta a nuevos incrementos en función de los datos económicos que se vayan conociendo, sobre todo en materia de inflación y empleo.
Con información de Reuters