La propuesta de reforma fue presentada por la morenista Susana Prieto Terrazas, el proyecto fue aprobado en abril y se buscaba su aprobación en la Cámara de Diputados en diciembre, pero el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Juan Ramiro Robledo perfiló la discusión hasta el próximo periodo de sesiones, entre febrero y abril de 2024.
Entre los factores que se deben considerar para esta reducción de jornada laboral están el tiempo para implementarla y las condiciones de los trabajadores.
El tiempo porque recientemente se han aprobado una serie de reformas en materia laboral y el aumento al salario mínimo que han incrementado los costos por trabajador, y hay que ser atractivos para aumentar la inversión.
“Tener un plan de reducción en el tiempo será muy bueno, no para mañana. También porque hay muchos empleados que incluso trabajan horas extra para completar el gasto. En estos días de descanso, en estas horas, tenemos que poder recuperar la economía, incluso de vacaciones, viajando a una ciudad, teniendo un centro de crecimiento”, dijo la presidenta.
Para esos cambios también hay que invertir en tecnología, y eso no va a pasar instantáneamente. Por ello es que los empresarios están insistiendo en que tiene que ser una aplicación gradual, consideró por su parte Beatriz Robles, directora de Operaciones y Cuentas Claves de Manpower.
“Me parece que todos estamos de acuerdo con que los trabajadores en México tengan condiciones dignas, tengan salario digno. Teníamos una deuda histórica en nuestro país: teníamos el menor número de vacaciones en el mundo. Estamos a favor de eso, pero es importante señalar que tiene que ser sostenible”, dijo Robles.
El tema de sostenibilidad es importante, primordialmente por los incrementos en los costos por trabajador, por ejemplo, cuando aumentaron los periodos vacacionales, solo los costos directos aumentaron, dependiendo de los turnos de trabajo, desde 25% y hasta 55%, explicó la directiva.
Aspectos que debe considerar el patrón
En la región de América Latina, hay países como Chile, donde ya se ha implementado esta reducción de jornada laboral, y Manpower ha observado que en promedio la reducción toma entre 3 y 5 años.
“Si tomas el caso chileno, creo que el cuarto año, entonces cada año reducen en dos horas la jornada hasta llegar, digamos, al objetivo general. De 3 a 5 años sería un buen periodo para que se haga la implementación, que las empresas podamos re-adecuar los horarios laborales, y hacerle frente a los costos que esto va a traer”, comentó Alberto Alesi, director general de ManpowerGroup para México, Caribe y Centroamérica.
Por ejemplo, se tiene que analizar si la producción se puede completar con los recursos humanos con los que ya se cuenta, a través de horas extra, o abrir incluso un nuevo turno con nuevos empleados.
“Nosotros constitucionalmente tenemos 6 días de trabajo y un día de descanso. Y lo que la reforma propone son 5 días de trabajo y 2 de descanso. La aplicación gradual no existe dentro de este dictamen que es el que presentó la Comisión de Puntos Constitucionales. Entonces, tendría que corregirlo”, culminó Flores.
Se espera que antes de que regrese a su discusión en el pleno de la Cámara de Diputados se solucionen algunas diferencias y detalles que han indicado los representantes del sector privado.