Sin embargo, se espera que el presidente de la Fed, Jerome Powell, haga hincapié en que cualquier recorte de los costos de endeudamiento está supeditado a una mayor mejora de la inflación, que pese a un rápido descenso este año sigue por encima del objetivo de 2% del banco central estadounidense.
Está previsto que el jefe de la Fed comience a hablar a las 12:30, media hora después de la publicación de la declaración de política monetaria y las proyecciones.
"Powell tendrá que caminar sobre una fina línea reconociendo el terreno ganado hacia la normalización de la economía, al tiempo que rechaza la idea de recortes tempranos de tasas", e incluso advertir de que la Fed podría volver a elevar los tipos si fuera necesario, escribieron los analistas de TD Securities al iniciarse la reunión de la entidad el martes.
Y, en efecto, la economía se ha normalizado mucho. La inflación según la medida preferida de la Fed, el índice de precios de los gastos de consumo personal, cayó a 3% en la última lectura, desde más del 7% en su punto máximo en el verano boreal de 2022.
Mientras tanto, la tasa de desempleo en noviembre cayó al 3.7%, apenas por encima de donde estaba cuando la Fed comenzó a subir los tipos desde el nivel cercano a cero en marzo de 2022.
Como parte de las proyecciones actualizadas, las autoridades darán su opinión sobre dónde se situarán probablemente la inflación, el desempleo y el PIB en los próximos años.
Sin embargo, el Departamento de Trabajo informó el martes de que los precios al consumo subieron de forma inesperada y que la inflación subyacente se aceleró en noviembre, recordando por qué Powell podría ser reacio a señalar el final de la campaña de alzas de tasas.
Aun así, los mercados financieros siguen previendo reducciones de un punto porcentual en la tasa de referencia a un día de la Fed el año que viene, a partir de mayo. El tipo oficial se sitúa actualmente entre 5.25% y 5.5%.
Estas apuestas y el descenso del rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años desde la reunión de la Fed del 31 de octubre al 1 de noviembre reflejan una reciente relajación de las condiciones financieras que, de continuar, podría complicar los esfuerzos de la entidad por controlar la inflación.
En su última reunión de política monetaria, las autoridades de la Fed afirmaron que creían que el aumento de las tasas a largo plazo del mercado de bonos estaba haciendo parte del trabajo de desaceleración de la economía por ellos.