Seguramente ya sabes que si comenzaste tu vida laboral después del 1 de julio de 1997 ya no tendrán una pensión vitalicia al momento de tu jubilación.
Con esa reforma al sistema de pensiones, cada trabajador ahorra, en una cuenta individual, para que llegado el momento de la jubilación tenga recursos para mantenerse.
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo el domingo que tiene pensado lanzar dos iniciativas de reforma, una de ellas relacionada con el tema de pensiones, pues considera que los mexicanos que tienen una cuenta de ahorro para el retiro (Afore) se retiran con un porcentaje muy bajo de su último salario.
A petición del sindicato de maestros y otros trabajadores, “vamos a revisar la reforma laboral de (Ernesto) Zedillo, la de las pensiones, y vamos a hacer una propuesta. Es inhumano, injusto, que un trabajador, después de 30 años de estar laborando, cuando termina ni siquiera recibe su salario cuando estaba en activo, sino la mitad, si le va bien. Eso ya no va a continuar así, voy a enviar una contrarreforma a esa legislación contraria a los intereses de los trabajadores”, dijo el presiente en el 117 aniversario de la huella de los obreros de Rio Blanco, en Veracruz.
López Obrador también comentó que presentará una iniciativa de reforma al Artículo 123 de la Constitución para que los aumentos del salario no estén por debajo de la inflación.
Antes de la Ley del IMSS de 1997, todos los trabajadores formales que se jubilaban tenían derecho a una pensión vitalicia. Todos los trabajadores registrados a partir de 1 de julio de ese año ya no iban a tener ese derecho.
A partir de julio de 1997 se crearon las cuentas independientes, donde cada trabajador iba a ahorrar para el monto del retiro.
La modificación surgió debido a la necesidad de encontrar un equilibrio en el sistema de pensiones, porque en 1997 incrementó la esperanza de vida en el país y hubo una disminución en la tasa de natalidad, lo que desproporcionó el sistema, pues se proyectaba la existencia de más pensionados que personas económicamente activas durante ese año, de acuerdo con un reporte del IMSS.
Para acceder a la pensión se estableció tener 1,250 semanas cotizadas y 65 años para comenzar con los trámites del retiro y la pensión.
Sin embargo, en 2021 se aprobaron modificaciones a Ley del IMSS 97 en beneficio de los trabajadores formales.
En 2021 ya no se necesitaban las 1,250 semanas cotizadas para alcanzar una pensión, sino 750 semanas, con un aumento de 25 semanas por año hasta llegar a 1,000 en 2031.
Para 2024 son necesarias 825 semanas de cotización.
Otro cambio tuvo que ver con las aportaciones voluntarias, con lo que se pasa de 6.5% del salario base de cotización del trabajador para llegar al 15% en 2030.
Para completar ese 15% en 2030, las cuotas patronales serán de 11.875%, 1.125% del trabajador y una cuota social del gobierno para los trabajadores que ganen menos de cuatro UMAs (unidad de medida y actualización).
A partir de 2023 las cuotas sociales del gobierno iban de 10.75 pesos a 6.25 pesos, con una mayor aportación para los empleados de menores ingresos (entre 1 y 4 UMAs).
Esta es para todas las personas que no cumplen los requisitos para tener una renta vitalicia o retiro programado.
Para tramitar la pensión garantizada dependerá de las semanas cotizadas y el salario promedio del último empleo del trabajador. Antes era necesario tener 60 años cumplidos y 1,250 semanas de cotización.
Es importante que el trabajador conozca el número de semanas cotizadas .
Se trata una pensión de por vida que se contrata con una Aseguradora de las que indica el IMSS.
El monto de la pensión dependerá del monto acumulado en la cuenta Afore, actualizándose anualmente de acuerdo con la inflación, garantizando el pago de una Pensión Predeterminada de por vida.
Para asegurar que los beneficiarios que defina el trabajador reciban la pensión cuando fenezca, se debe comprar un Seguro de Sobrevivencia con los recursos de la cuenta individual.
Es una pensión que se contrata con la Aafore en la que está registrado el trabajador; el monto dependerá del monto que haya acumulado, de los rendimientos que se obtengan y de la esperanza de vida que se le haya calculado.
Esta pensión se entregará hasta que se agoten los recursos de su Afore.
En este esquema también se recomienda asegurar que los beneficiarios reciban tu pensión cuando fenezcas, por lo debes comprar un Seguro de Sobrevivencia.
En caso de no cumplir con los requisitos marcados por la Ley para poder acceder a una pensión (semanas cotizadas), el IMSS te otorgará una negativa de pensión con la que podrás solicitar a tu Afore el total de tus recursos acumulados en tu Cuenta Individual. Para ello será necesario: tener entre 60 y 64 años cumplidos para la pensión por cesantía, y 65 para la pensión por vejez; y tener actualizado el Expediente de Identificación.
También es necesario que tengas los siguientes documentos: identificación oficial, estado de cuenta de la Afore, o un comprobante que acredite su registro en la administradora; un estado de cuenta bancario con el número CLABE y la resolución o negativa de pensión emitida por el IMSS.
