En lo que va de la administración, el Servicio de Administración Tributaria (SAT), liderado por Antonio Martínez Dagnino, ha alcanzado una recaudación de 3.4 billones de pesos mediante auditorías y promoción de cumplimiento.
Esta cifra representa un aumento de 2.2 billones de pesos en comparación con el sexenio anterior, lo que equivale a un crecimiento real del 113.4%.
En el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el SAT ha fiscalizado 1.3 billones de pesos a las grandes contribuyentes, más del 106% en términos reales que lo recaudado por este mismo concepto de 2013 a 2018, cuando Enrique Peña Nieto fue presidente.
El SAT detalló en un comunicado que la recaudación por auditorías a los grandes contribuyentes ha sido de más de 1 billón de pesos, en lo que va del sexenio.
Estas acciones forman parte del Plan Maestro implementado por el Jefe del SAT, cuyo objetivo es incrementar la recaudación de grandes contribuyentes mediante: Auditorías para evitar planeaciones fiscales agresivas, incremento de la percepción de riesgo en los grandes contribuyentes y certidumbre jurídica al contribuyente.
Según el SAT, se programaron 5 auditorías con un enfoque más asertivo y con menor tiempo de fiscalización, abarcando hasta cinco ejercicios fiscales anteriores. Estas auditorías se han enfocado en incentivar la autocorrección y el cobro oportuno, eliminando el rezago de créditos fiscales y depurando la cartera.
Además, se ha reforzado la verificación de la aplicación de saldos a favor del impuesto al valor agregado (IVA).
Una auditoría del SAT a grandes contribuyentes es una revisión exhaustiva de la información contable de una persona o empresa. Estas auditorías se realizan cuando el SAT detecta inconsistencias en la información declarada o cuando se determina que no se cumplen las obligaciones fiscales. Durante la auditoría, el SAT puede revisar documentos como:
En México, el término "grandes contribuyentes" se refiere a instituciones de crédito, empresas que cotizan en la bolsa de valores, organismos internacionales y personas morales con elevados ingresos que tributan en el régimen general del Impuesto Sobre la Renta (ISR). Estos contribuyentes están sujetos a ciertas obligaciones y regulaciones fiscales especiales.
La clasificación como “gran contribuyente” está determinada por la Ley del ISR, el Código Fiscal de la Federación y el Reglamento del Servicio de Administración Tributaria. Actualmente, el padrón de grandes contribuyentes asciende a 11 mil 909 empresas, representando el 0.02% del total.
Para ser considerado como gran contribuyente, la empresa debe tener ingresos anuales superiores a 1,500 millones de pesos (mdp) al año, además de considerar el valor de su patrimonio, la cantidad de impuestos pagados y otros factores económicos relevantes, explica el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas.
Las obligaciones adicionales de los grandes contribuyentes incluyen:
