"Reconocemos el derecho soberano de cada gobierno de actualizar su constitución y valoramos profundamente la sólida asociación entre Estados Unidos y México. Sin embargo, muchas de las reformas propuestas parecen comprometer el acceso de los inversionistas estadounidenses a un marco regulatorio estable, predecible e imparcial", señalan en la misiva.
Empresarios estadounidenses en México han expresado que las reformas que más les inquietan es la del Poder Judicial y la que elimina a los órganos autónomos, así como en materia de energía y minería.
"Nos preocupan los esfuerzos del Gobierno mexicano por prohibir o limitar ciertos métodos de extracción, restringir la exploración de litio, las operaciones y permisos de electricidad, restringir las importaciones de maíz genéticamente modificado o abolir los organismos reguladores independientes. Tales políticas socavarían la competitividad de América del Norte y crearían un entorno desafiante para las empresas relevantes que buscan operar bajo las reglas del T-MEC en México", advierten.
Los congresistas señalan que, ante el cronograma previsto para considerar estas reformas, se requiere que la representante comercial de Estados Unidos interactúe rápidamente con el gobierno mexicano para garantizar que las inquietudes de las partes interesadas estadounidenses se comuniquen adecuadamente.
"Además, mientras nos preparamos para la revisión del T-MEC en 2026, es imperativo que cada país socio respete la integridad del acuerdo. Cualquier acción que contravenga las obligaciones del T-MEC creará dudas significativas sobre el compromiso con nuestros objetivos compartidos e inevitablemente dificultará el proceso de revisión", indica la carta.
Los legisladores piden una respuesta por escrito antes del 20 de septiembre sobre la postura de Joe Biden y Kamala Harris sobre las reformas constitucionales propuestas relacionadas con la energía, la minería, el maíz genéticamente modificado, las agencias reguladoras autónomas y la reforma judicial.
También quieren saber cuál es el impacto previsto que tendrían estas reformas en las empresas e inversores estadounidenses y cómo es que la representante comercial de Estados Unidos ha estado interactuando con las partes interesadas de su país para defender sus intereses.