“Es posible que quienes ya descuenten las reformas consideren que, aunque éstas debiliten la democracia, no implicarán políticas económicas anti-mercado ni debilitarán el marco macroeconómico. Puede ser que tengan confianza en las políticas públicas de la próxima administración, aunque se pierdan contrapesos. El problema es que, sin contrapesos y un sólido Estado de derecho, la incertidumbre de que esa perspectiva se concrete crece fuertemente”, añadió Citibanamex.
Es importante recordar que el peso mexicano ha presentado una tendencia de retroceso frente al dólar desde marzo de este año, cuando alcanzó su mejor nivel -16.33 pesos por dólar-, coincidieron Humberto Calzada y Ramsé Gutiérrez.
A decir de Humberto Calzada, una vez que pase la volatilidad, el tipo de cambio se podría relajar en un nivel de 18 y 19 pesos. “18.50 pesos sería un nivel bueno para el tipo de cambio después de la turbulencia que se ha presentado en el mercado cambiario”, adelantó.
Más reformas y elecciones en EU seguirán afectando
El peso mexicano suele responder a factores tanto locales como foráneos. Actualmente se vive una combinación de factores de ambos lados que han provocado volatilidad en el cruce frente al dólar.
En el plano local, explicó Gutiérrez, en materia legislativa está sobre la mesa la reforma electoral y la desaparición de organismos autónomos y reguladores, así como la aprobación del Paquete Económico 2025.
“Hay muchas promesas de programas sociales. Se puede reducir el gasto del gobierno, pero hay muchos gastos de política económica, ahí es donde se pueden poner nerviosos los inversionistas y decir: ‘si el déficit fiscal va a seguir creciendo, va a ser inminente la pérdida de grado de inversión”, anticipó Ramsé Gutiérrez.
En el ámbito global, coincidieron los analistas, lo que ocurra con la política monetaria en Japón y el comportamiento del yen japonés tendrá un impacto en el peso, pues entre más fuerte sea la divisa japonesa será menos atractivo el carry trade -pedir prestado con bajas tasas de interés e invertir en México, donde la tasa de interés es de 11%-, así como las tensiones geopolíticas.
El factor más importante que afectará a la moneda mexicana los próximos meses tiene que ver con la elección de Estados Unidos, así como el comportamiento de la economía estadounidense y las decisiones de política monetaria que tome la Reserva Federal (Fed).
Es así que los especialistas consultados señalan que la incertidumbre sobre el tipo de cambio ser mantendrá lo que resta del año.
Sin embargo, concluyó Gutiérrez, hay factores que seguirán jugando a favor del peso mexicano: el crecimiento de las remesas, el nearshoring, los nómadas digitales y el gasto de los turistas extranjeros en el país; "fundamentos por los que vimos el súper peso hace algunos meses", concluyó.