Los costos de Otis han sido superados apenas por la pandemia y por el huracán Wilma en 2005. La industria aseguradora destaca que el 72% de los daños que más pagan corresponden a eventos hidrometereológicos como las lluvias o los huracanes.
Tan solo en las últimas dos décadas, los tres huracanes de mayor impacto han generado costos de 6,500 millones de dólares para las aseguradoras.
Aseguradoras como HDI han reportado que hasta el momento se han hecho pagos por más de 200 millones de pesos para daños y autos.
Las embarcaciones, que han sido uno de los principales afectados tras el paso del siniestro, han registrado un pago del 91% del valor total de las pérdidas y afectaciones.
Las pequeñas y medianas empresas reportan 2,526 reportes en daños con pérdidas de 12,866 millones de pesos.
México es uno de los 10 países con mayor riesgo catastrófico por fenómenos naturales, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y 45% del territorio está expuesto a inundaciones, según el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred).
Se destaca que la inversión que hace México como porcentaje del PIB es de apenas el 3.2%, cifra por debajo de otros países como Chile y Brasil.