El especialista destacó que las tarifas tienen un efecto ambiguo sobre la inflación en México: por un lado, se deprecia el peso y eso eventualmente hace que haya más inflación; por otro lado, hace que la actividad económica en México se desacelere, lo que tendría que ayudar a que la inflación se desacelere.
El economista explicó que en los últimos datos, la inflación de mercancías empezó a subir y era la que estaba ayudando a que la inflación se contuviera.
Añadió que muchas de las mercancías en México se importan y desde la elección presidencial el peso se ha depreciado más de 20%, lo que se verá reflejado en la inflación de mercancías.
Si a pesar de que Trump imponga aranceles y Banco de México decida recortar la tasa, habrá una depreciación del peso, la inflación se dispararía y eventualmente el banco central tendría que volver a subir la tasa.
Bank of America Securities espera que para el cierre del año, Banco de México ubique la tasa en 8.75% y que el crecimiento económico sea de 0.8%.