El ecosistema emprendedor se ha vuelto más competitivo. Mientras la pandemia ponía en aprietos a muchas empresas, las startups tecnológicas han encontrado un terreno para crecer ante la necesidad de volver nuestras vidas más digitales. Las enfocadas en e-commerce, por ejemplo, registraron en seis meses el crecimiento programado para los siguientes 24 o 36 meses. Y los fondos de venture capital saben que, en este contexto, también tienen que acelerar su apuesta. Es lo que busca hacer Angel Ventures, liderado por Hernán Fernández y Camilo Kejner, que acaba de adquirir Coonector, una firma mexicana especializada en vincular a startups con corporativos para impulsar la innovación abierta.
La adquisición, de la que el fondo no revela monto de compra, surge de una realidad clara: cada vez más empresas buscan mejorar sus procesos de innovación a través de su asociación con emprendedores. “Antes había muchos corporativos que veían una startup que estaban revolucionando su negocio y no podían vencer la tentación de decir: ‘dennos presupuesto y lo resolvemos internamente’. Hoy los corporativos más avanzados, que realmente están mirando temas de innovación abierta, se dieron cuenta de que es más fácil traer una visión externa para solucionar el problema, que tratar de desarrollarlo inhouse”, afirma Kejner.
