¿Puede López Obrador cancelar la reforma energética?

El candidato presidencial sí podrá detener las licitaciones petroleras, aunque es poco probable que rescinda los contratos ya otorgados, consideran analistas y funcionarios del sector.
Promesa. Andrés Manuel López Obrador ha dicho que revisará la reforma. (Foto: Saúl López)

El candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador ha dicho en repetidas ocasiones que revisará la reforma energética. ¿Podrá cancelar la apertura del sector a la inversión privada?

Según analistas y funcionarios de la industria, si gana las elecciones, sí podrá frenar las licitaciones y asociaciones de Pemex con otras empresas.

“Sería muy lamentable que se paren los farm outs (asociaciones) y las licitaciones, pero yo esperaría que no se toquen las ya existentes”, considera Francisco Monaldi, de la Universidad de Rice, en Estados Unidos, y experto en temas energéticos en América Latina.

López Obrador ha prometido también que revisará los contratos que ya se han otorgado durante los siete procesos licitatorios de las Rondas 1, 2 y 3, que hasta la fecha suman 107 bloques adjudicados.

Sin embargo, la rescisión de los contratos sólo se puede dar por las figuras que prevé la Ley de Hidrocarburos: la falta de inversión, desastres naturales ocasionados por las empresas o el abandono del proyecto por las compañías. Esto buscó dar certeza sobre su continuidad sea cual sea la siguiente administración, dice el comisionado presidente del Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), Juan Carlos Zepeda.

“No hay forma de rescindir ni cancelar los contratos más allá de lo que señale la ley. La única autoridad facultada para rescindir contratos petroleros en el país es la Comisión Nacional de Hidrocarburos”, destaca

Monaldi prevé que, de ganar las elecciones presidenciales, López Obrador siga la estela de otros gobiernos de izquierda, como el de Hugo Chávez en Venezuela y el de Lula en Brasil, quienes respetaron las asignaciones ya otorgadas antes de sus mandatos.

“Pasó en Brasil con Lula. Él no tocó los contratos ya existentes, no renegoció ni canceló contratos. Pero hacia futuro paró un poco las licitaciones”, dice Monaldi.

“Básicamente hay dos corrientes en estas elecciones. Una que es la continuidad, y otra que es detener y revisar”, añade el socio de la consultora KPMG, Rubén Cruz.

Monaldi anticipa que, de llegar a la presidencia, el equipo de López Obrador será más pragmático,

, no tiene sentido cancelar lo ya hecho en la reforma.

“Cuando ellos saquen los números, cuando se sienten, cuando estén con la cabeza fría, si llegan a ganar, van a concluir que tienen que ser pragmáticos. Eso no quita que por razones ideológicas, como por darle el gusto a su base política, hagan algunas cosas que igual pueden asustar a los inversionistas”, explica el miembro de la Universidad de Rice.

Las actuales autoridades del sector esperan que se continúe con lo hecho hasta el momento en cuanto a las licitaciones petroleras.

“Cualquiera que sea el signo partidista del próximo gobierno federal en México, por elemental sentido común, y de protección a los intereses del país, debe cuidar la aplicación de la reforma energética”, dijo el titular de la Secretaría de Energía,

La producción de petróleo se encuentra en mínimos desde 1980, y la extracción de crudo lleva 13 años con continuas caídas desde que alcanzara su máximo histórico en 2004.

El gobierno espera lanzar al menos tres rondas más de licitaciones antes de que termine el actual sexenio, y todas se darán tras las elecciones presidenciales del 1 de julio de este año.