El gobierno francés le había pedido a Sanofi que estudiara la posibilidad de poner a disposición sus cadenas industriales para aumentar la producción de vacunas ya existentes.
La vacuna de Pfizer es hasta ahora la única que cuenta con la aprobación de uso de emergencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El acuerdo entre Sanofi y la farmacéutica estadounidense ocurre días después de que Pfizer anunciara una reducción temporal en las entregas de las dosis comprometidas previamente con algunos países, México entre ellos, mediante contratos de precompra.
Este retraso se debe a que Pfizer acordó con la OMS la entrega de 40 millones de dosis de su vacuna, con las que el organismo iniciará el próximo mes las campañas de inmunización en países pobres y de ingresos medios bajos en el marco de su programa COVAX.
El acuerdo entre la OMS y Pfizer se produce en medio de crecientes críticas por la desigualdad en la entrega de vacunas, ya que las naciones ricas pueden inmunizar a millones de personas con inyecciones adquiridas a través de acuerdos bilaterales.
El director ejecutivo de Pfizer, Albert Bourla, sostuvo que las 40 millones de dosis, es apenas una fracción de la producción total estimada de la compañía en 2021 de 2,000 millones de dosis.
"En este mundo estamos tan protegidos como nuestro vecino", dijo Bourla, al anunciar oficialmente el acuerdo con la OMS.
Se espera que la mayor parte de los 100 millones de dosis de la vacuna de Pfizer y BioNTech envasadas por Sanofi se distribuyan en la Unión Europea.
Con información de Reuters y AFP