General Motors también dijo que la próxima semana reiniciará las operaciones de otras tres plantas, una en Estados Unidos, otra en Canadá, y una más en Corea del Sur, que produce el Chevrolet Trailblazer y el Buick Encore GX y que ha estado operando al 50% de su capacidad desde el 26 de abril.
Las acciones de General Motors subían 4% en las primeras operaciones del jueves, tras el anuncio de la reapertura de las cinco plantas.
El fabricante estadounidense, uno de los más afectados por la crisis de los semiconductores, dijo que su "organización de la cadena de suministro sigue haciendo avances para mitigar los impactos a corto plazo de la situación de los semiconductores".
El fabricante ha adelantado a mediados de junio el reinicio de las labores en otras plantas. La planta de ensamblaje en Ingersoll, Ontario, que fabrica el Equinox, reanudará la producción antes de lo previsto, el 14 de junio, y funcionará hasta el 2 de julio. La planta lleva parada desde el 8 de febrero.
Lansing Grand River reanudará la producción del Chevrolet Camaro antes de lo previsto, el 21 de junio. La planta lleva parada desde el 10 de mayo.
General Motors dijo que sigue aprovechando todos los semiconductores disponibles para fabricar sus productos más demandados, incluidos las camionetas de tamaño completo y las SUV, pero dijo que la situación sigue siendo incierta en el mundo.
La consultora AlixPartners ha estimado que la escasez mundial de chips costará a los fabricantes de automóviles 110,000 millones de dólares en pérdidas de ingresos este año, frente a un cálculo anterior de 61,000 millones, ya que prevé que afectará la producción de 3.9 millones de vehículos.
Con información de Reuters