La primera de ellas, exhorta a Aeroméxico a “actuar rápidamente” para concluir el proceso de reestructura con el paquete de financiamiento de salida que tenga más probabilidad de asegurar una salida del Capítulo 11 antes de fines de 2021, y “proporcione a la compañía los recursos y la experiencia necesarios para prosperar como la principal compañía aérea de México en un mercado latinoamericano cada vez más competitivo”.
“Si bien el plan de la compañía es importante en el proceso de quiebra, también es importante que Aeroméxico se reconstruya desde una posición sólida en 2022 y pueda hacer crecer la aerolínea en el futuro”, refiere la carta presentada ante la Corte del Distrito Sur de Nueva York.
Además, ASPA consideró que “es imperativo” que Delta –que a la fecha tiene 49% del capital social de Aeroméxico– apoye los términos y la estructura del paquete de financiamiento de salida, y que continúe ofreciendo apoyo financiero, operacional y estratégico a la aerolínea.
Finalmente, el sindicato de pilotos consideró esencial que la aerolínea emerja del Capítulo 11 con una mayoría de accionistas mexicanos, conforme lo requiere la Ley de Inversión Extranjera. “Es crítico que el paquete de financiamiento de salida cumpla plenamente con la ley mexicana al incluir a un grupo de accionistas mexicanos que pueda ayudar a Aeroméxico a prosperar, a medida que la compañía se recupera de la pandemia”.
ASPA representa a casi 1,800 pilotos de Aeroméxico y Aeroméxico Connect, y es uno de los cinco integrantes del comité de acreedores no asegurados en el proceso de reestructura de Aeroméxico bajo el Capítulo 11.
Entre julio y agosto, ASPA vendió a Barclay’s parte de la deuda reconocida por Grupo Aeroméxico, en dos transacciones por 268 millones de dólares y 45 millones de dólares, que dieron liquidez a los pilotos sobre estos compromisos.