Cancún, Quintana Roo. La ley para regularizar el uso del cannabis medicinal e industrial tiene ya un camino avanzado. Si bien en ambos rubros el uso es legal, es en el área industrial en donde hay un vacío que, de no cambiarse, meterá freno al desarrollo en México de una industria que podría alcanzar un valor de mercado de 5,000 millones de pesos, según cifras de la industria.
Expertos que participaron en el Business Investment Summit, organizado por CannabiSalud, coinciden en que es necesario que la ley haga una diferencia entre cáñamo y cannabis. El primero contiene menos de 1% de THC, que es el componente psicoactivo de la planta, lo que significa que no provoca ningún efecto en el sistema nervioso. La marihuana sí contiene niveles altos de THC y también tiene algunas propiedades medicinales, que ya se emplean en medicamentos para tratar enfermedades como la epilepsia.
“Es necesario que se regule toda la planta, todas las sustancias que contiene la flor. Es importante que las autoridades tengan el conocimiento sobre los usos y vean que, si bien pueden existir ciertos riesgos sanitarios ante un mal uso de la sustancia, hay muchísimos beneficios cuando es bien regulada. Cuando hay una prohibición, no existe control por parte del Estado y no es posible aprovechar estas cualidades”, puntualizó Iñigo Olavarri, cofundador de Procanna Solutions.